La preocupación se ha instalado definitivamente en las principales peñas del Hércules tras conocer de primera mano, por boca de Ramírez, la situación límite en la que se encuentra el club, que espera el visto bueno de Hacienda para firmar un nuevo convenio. El empresario vasco se reunió anoche con los representantes de varias agrupaciones .

El club alicantino debe a Hacienda 4,3 millones de euros y, tras rechazar una anterior oferta, Ramírez ha propuesto ahora pagar en efectivo dos millonesdos millones y el resto en garantías hipotecarias. A la reunión, celebrada en el estadio José Rico Pérez, han asistido una treintena de dirigentes de las peñas y aficionados y se ha prolongado por espacio de media hora.

El presidente del Hércules ha reiterado a los peñistas y seguidores que en el caso de que la Agencia Tributaria no acepte su propuesta presentará su dimisión y se ha mostrado preocupado por cierta pasividad que aprecia en el entorno de la entidad ante una situación crítica.

Ramírez ha insistido en que no puede hacer más esfuerzos económicos y que en el caso de que su plan sea de nuevo rechazo la entidad entrará en fase de liquidación. La planificación deportiva del Hércules, que competirá por cuarta temporada consecutiva en Segunda B, ha quedado hipotecada por completo hasta que la entidad no alcance un acuerdo con Hacienda.