El dirigente del Hércules Juan Carlos Ramírez rompió su silencio de los últimos meses en el brindis navideño celebrado en el Rico Pérez junto a los jugadores y técnicos al que también asistió Enrique Ortiz. No quiso cargar las tintas contra el alcalde Gabriel Echávarri, pero sí le lanzó algún dardo y además reconoció que la falta de gol es el principal problema del equipo de Herrero.

¿La segunda parte del curso va a ser especialmente dura por la falta de recursos?

En Segunda B, es complicada cualquier temporada desde septiembre. Teníamos claro que debíamos tirar del carro hasta diciembre a expensas de lo que pasara a nivel institucional. En cualquier empresa necesitas tranquilidad y confianza, y en esta más aún, no bulos que perjudican a la institución. Si algún inversor serio está interesado en el Hércules, que venga. Pero es muy fácil decir que se vaya Enrique (Ortiz). Si se va entonces qué pasa, quién pone el dinero. Desde luego, yo sólo no me voy a quedar. Del alcalde (Gabriel Echávarri) prefiero no decir mucho, solo que creo que se equivoca. Le deseo felices fiestas y espero que él nos las desee a nosotros también.

¿Qué balance hace de esta primera vuelta a falta de un partido para el parón navideño?

El equipo se ha ido asentando, hay menos lesiones que el año pasado, y jugamos un futbol más vistoso, pero nos ha faltado meter más goles. Si en la segunda vuelta sacamos los mismos puntos que en esta primera, estaremos en la pomada por el playoff.

Pero usted siempre hablaba de la primera plaza...

Es que me dais (a los periodistas) mucha caña si lo hago porque meto presión a los jugadores. Tenemos que salir a ganar todos los partidos, ojalá logremos el primer puesto porque te da muchas más posibilidades de ascender.

Parece que el Hércules hará un mínimo de tres fichajes en enero, ¿tanto hay que cambiar?

Vamos a ver como acaba la primera vuelta con los dos partidos que faltan (ante el Olot y el Llosetense). La dirección deportiva está trabajando con muchos nombres porque se pueden mejorar varias posiciones. No hay nada decidido aún. Debemos tener claro que el que venga debe mejorar lo que hay. Hay un gran grupo humano en el vestuario pero esto es un club profesional y todos nos jugamos mucho. Ojalá pudiéramos acabar la temporada con los mismos jugadores y subir, pero si podemos mejorar el equipo lo vamos a hacer.

¿La negociación con David González está rota o es reconducible?

Está rota y no hay vuelta atrás.

Esto le abre la puerta a Javi Flores...

Creo que sí. Pero en el fútbol, lo que crees que está hecho al día siguiente puede no estarlo. Todos los informes que nos llegan de Flores son buenos, yo coincidí con él en el Elche pero no intervine en su fichaje. Es mediapunta, puede jugar en banda izquierda y tiene un gran balón parado.

Es la segunda vez que David González parece que va a venir y al final no...

Le deseo toda la suerte del mundo, pero una negociación no se puede alargar tanto. A Dani (Barroso) le di unos números concretos para cerrar la operación. David dijo que sí y a las 24 horas fue que no. Lo único que queríamos nosotros era que pasara un reconocimiento médico completo para ver como está de grasa y demás. No podemos traer a ciegas a un jugador que lleva seis meses parado. Al final la cuerda de la negociación la ha tensado tanto que la ha roto.

Por segunda temporada consecutiva la falta de gol es el principal mal del equipo...

La preocupación de todos es que no tenemos gol y estamos trabajando en ello. Hay varios nombres en la mesa y habrá novedades. Pero no es fácil encontrar un nueve que te garantice goles. El problema no es de juego, sino de puntería.

¿Asumen que el verano pasado no se arregló el problema del gol con Portillo y Mariano?

Portillo ha metido goles en Segunda, pero el estado anímico de los jugadores hace mucho. El problema de gol tampoco es solo de los delanteros porque el resto de compañeros también se tienen que sumar al ataque y pisar el área contraria. El futbol es caprichoso. Contra el Hospitalet hicimos el peor partido de la temporada y ganamos 2-0. Y contra el Pobla merecimos meter cuatro o cinco y empatamos a uno. El año pasado la asignatura pendiente no solo era el gol, también el juego, no me gustaba lo que veía.

¿Le preocupa que las bajas puedan afectar al vestuario?

Este es un club profesional, es la ley del futbol. Cuando a un compañero de trabajo lo mandan a otra ciudad pues da un poco de pena, pero los que estamos al frente debemos apostarlo todo al ascenso.