Ninguna frase de Manolo Herrero tan reveladora como esta: «Lo que veo es muy parecido a lo que me encontré cuando llegué al Hércules». Sólo han pasado cinco jornada y el equipo blanquiazul es un manojo de nervios en el Rico Pérez, vulnerable y con la pólvora mojada. El técnico de Andújar siempre ofrece un discurso realista y alejado de los tópicos. Anoche se mostró preocupado, sorprendido y dolido por cómo perdió el Hércules su segundo partido del curso. «Contra el Villarreal B perdimos 0-4 pero las sensaciones eran mejores, hoy he visto miedos y dudas, el equipo no ha estado suelto, sino espeso, lento y previsible, así nos meteremos en problemas», explicó Herrero.

El preparador blanquiazul insistió una semana más en los graves errores defensivos cometidos y consideró que ese es el principal defecto a corregir para levantar cabeza: «Somos muy vulnetables, no se puede ser tan blandito, regalamos goles nada más empezar y así es imposible. Y con 1-1 no nos pueden marcar ese gol al final, son errores que no se entienden».

Herrero justificó sus múltiples cambios tácticos en la «búsqueda de soluciones» y probó con Gato hasta en cuatro posiciones diferentes. «Ha sido un partido malo y lo he intentado cambiar desde el banquillo, viendo el resultado está claro que me he equivocado, tenemos mucho que trabajar», señaló. Respecto a la sorprendente sustitución de Gallar en el descanso tras haber marcado el gol, respondió: «En el lanzamiento de falta ha estado magnífico pero en el juego debe aportar más. Quise que tuviéramos más llegada con Adri (Cuevas) por detrás del delantero y Gato en la izquierda».

El Hércules no podrá contar el próximo domingo ante el Barcelona B con el mediocentro Juanma Espinosa, que fue expulsado en el tramo final.