Por tercera vez en su historia el Hércules se ve abocado a solicitar concurso de acreedores como paso imprescindible para asegurar su supervivencia siguiendo el plan de viabilidad marcado por sus gestores.

Ayer fue el día elegido para entregar en el registro del Juzgado de lo Mercantil de Alicante la documentación solicitando quedar bajo el manto de la Ley Concursal y así comenzar el proceso de saneamiento de los 59 millones de euros de deuda que pesan sobre la entidad.

La millonaria cifra contempla más del cincuenta por ciento -alrededor de 35 millones- de deuda a los principales accionistas; siete millones a los futbolistas por impago de una parte de las nóminas de la última temporada y el resto a distintos acreedores.

El club alicantino solicitará para el convenio una quita máxima del cincuenta por ciento y cinco años de plazo para abonar las deudas.

La deuda con los futbolistas podría correr otra suerte dado que la Liga de Fútbol Profesional contempla un pago de siete millones de euros al Hércules por el descenso de este año y tal cantidad debe ir destinada a cubrir ese apartado.

En la solicitud, que tendrá que ser aprobada en los próximos días por el juez, también se incluye un plan de viabilidad donde se detalla un presupuesto equilibrado para la próxima temporada, informa Efe.

Según un comunicado oficial de la entidad alicantina, "la puesta en práctica de este plan, junto con los acuerdos que se deriven del procedimiento concursal, permitirán al club aliviar su actual situación con el fin de que se desarrolle un modelo de negocio viable y sostenible a largo plazo".

Perfecto Palacio, miembro de la comisión ejecutiva, confirmó también la intención de la entidad de realizar un Expediente de Regulación de Empleo (ERE), como un medio más para conseguir un Hércules "saneado".

Con estas actuaciones, Palacio considera que el Hércules pasará "de una situación de UVI a estar en planta", utilizando un símil médico, aunque apuntó que "el enfermo sigue estando grave". Eso sí, matizó que, de esta forma, el club empezará a ver "la luz al final del túnel".

Proceso

Si finalmente, el juez resuelve a favor, el Hércules quedará intervenido por administradores judiciales que supervisarán y controlarán la contabilidad del club y serán los encargados de asegurar que todos los pagos que se tengan que hacer a partir de ese momento se cumplan.

Los administradores no entrarán en las decisiones técnicas, solo se encargarán de que todas las deudas que genere el Hércules desde ese momento sean pagadas. Para ello, el club debe plantear un plan de viabilidad en el que explique cómo se va a gestionar.

Cambios en la Ley

Todos los dirigentes del fútbol español están advertidos de que, a partir del verano de 2012, en solo doce meses, la normativa legal va a cambiar sustancialmente y su aplicación como solución a las deudas millonarias de las entidades futbolísticas será muchísimo más severa de lo que lo es actualmente (la modificación de esta ley no tendrá carácter retroactivo en ningún caso).

En ese sentido, el secretario de Estado para el Deporte, Albert Soler, se mostró crítico el pasado miércoles con la situación actual del fútbol español, y por ello, anunció, como una medida en busca de soluciones, la creación de una mesa de trabajo para la búsqueda de un nuevo modelo.

"Esto ha llegado casi a su fin", indició,"no puede ser que el derroche, la falta de responsabilidad y profesionalidad como gestores de algunos dé una imagen mala del fútbol. Los que han usado de forma perversa la Ley Concursal y no descienden deportivamente hablando, empeora esta imagen", subrayó Albert Soler, aunque aclaró que la ley está "bien utilizada" y que "es perversa porque los que entran se ahorran el descender".