Era un secreto a voces en el entorno del Hércules que algunos de sus futbolistas llamados a marcar diferencias apenas están involucrados en el proyecto. Los rumores de salidas nocturnas, molestias físicas de dudosa credibilidad y demás actos de indisciplina quedaron ayer en agua de borrajas para dar paso a la constatación de que David Trezeguet y Royston Drenthe no están por la labor de ayudar a sus compañeros en la trascendental cita de hoy en La Rosaleda de Málaga.

Ambos alegaron problemas físicos de escasa entidad que el jefe de los servicios médicos, Jeroni Llorca, no pudo encubrir. "Las pruebas a las que se les ha sometido no revelan ninguna lesión, pero ellos dicen que sienten dolor", afirmó ayer el galeno blanquiazul al término del último entrenamiento semana realizado, a puerta cerrada en el Rico Pérez.

David Trezeguet esgrimió unas molestias musculares en el abductor para no viajar a Málaga, mientras que Drenthe, que entrenó durante toda la semana con absoluta normalidad, se refugió en unos repentinos dolores en la rodilla que provocaron la indignación de muchos de sus compañeros.

De hecho, la tensión se podía cortar con un cuchillo ayer en el vestuario del Rico Pérez. Varios futbolistas les pidieron explicaciones a Drenthe y Trezeguet y les hicieron saber que Javier Farinós viajaba a Málaga pese a estar lesionado y que podían tomar ejemplo. La respuesta de ambos enervó todavía más los ánimos y parece poco probable que el ariete francés y el extremo galo vuelvan a disfrutar de minutos en los partidos que restan para acabar la temporada, ya que se han enemistado con buena parte del vestuario y Djukic está muy decepcionado con su actitud.

Con Farinós dentro de la convocatoria para dar más respaldo moral que sobre el césped, ya que no se vestirá de corto por una sobrecarga en el sóleo, el Hércules afronta el crucial choque de hoy muy mermado. El argentino Fritzler ocupará el enorme hueco dejado por el valenciano, mientras que Sendoa ejercerá como extremo en detrimento de Drenthe. Tiago Gomes volverá a actuar como mediapunta tras su gol ante el Deportivo y Valdez será la principal referencia ofensiva por la incomparecencia de Trezeguet.

Por su parte, el Málaga de Pellegrini afronta esta final con la moral por las nubes tras sus dos victorias consecutivas frente a Mallorca (3-0) y Racing (1-2). Julio Baptista ha despertado de su letargo competitivo y amenaza a un Hércules que aspira a puntuar en La Rosaleda y dejar en anécdota el polvorín que hay montado en su vestuario.