Marta Ortega, hija del fundador de Inditex, Amancio Ortega, quien posee una de las mayores fortunas del planeta, se va a casar con su novio, el jinete asturiano Sergio Álvarez Moya. La amazona coruñesa, de 27 años, y su pareja, de 26, mantienen una relación estable desde hace más de tres años. Aún no ha transcendido ningún detalle del enlace porque la familia Ortega -que es experta en secretos- mantiene un hermetismo absoluto y no quiere dar ningún detalle de la boda. LA OPINIÓN se puso ayer en contacto con familiares del novio que apuntaron "al mes de noviembre del año que viene" como fecha más probable de la boda, frente a algunas fuentes que situaban el enlace en el mes de febrero del próximo año. Lo que sí está claro es que hay celebración a la vista.

Sergio Álvarez Moya, hijo del empresario avilesino Julio Álvarez Camporro y de Margarita Moya Zamora, es el pequeño de tres hermanos varones. Es el puntal del equipo español de saltos y primero en el ranking nacional de esta disciplina hípica. Por Asturias se deja ver poco. La última vez que viajó a su tierra natal fue hace unos días, para participar en el Concurso de Saltos Internacional de Gijón. En Navidad también suele viajar al Principado para pasar un par de días en compañía de sus familia, que reside en las afueras de Avilés. Donde se deja ver más a menudo es en Galicia, la tierra de Marta, como él mismo reconocía en unas declaraciones recientes: "Allí es donde tengo los caballos y el centro de entrenamiento", comentaba sin hacer alusión a su futura esposa. En A Coruña le está funcionando a la perfección el entrenamiento de sus caballos en las instalaciones hípicas propiedad de su futuro suegro, Amancio Ortega.

Marta Ortega es la tercera hija del fundador de Inditex, y la única nacida de su segundo matrimonio con Flora Pérez (tiene otros dos hijos de su primera unión, con la empresaria coruñesa Rosalía Mera). Empezó a montar a caballo a los diez años y ha dedicado más de la mitad de su vida a la hípica, su gran pasión. Con los años, Amancio Ortega vio que lo de los caballos iba en serio y le construyó a su ojito derecho el complejo hípico Casas Novas, en la localidad coruñesa de Arteixo.

La educación de Marta ha sido medida al milímetro: estudió en el colegio Santa María del Mar de A Coruña y en un internado en Suiza. Después se licenció con nota en Ciencias Empresariales en la prestigiosa European Business School londinense. Habla inglés, francés e italiano. Concluida la licenciatura, se produjo su proceso de inmersión en los dominios laborales familiares. Entró a trabajar en Inditex como dependienta de una tienda de Bershka en Londres. De allí, pasó a otro establecimiento de Barcelona para finalizar su periplo de atención al público en Shanghái. Desde el pasado mes de noviembre, la joven trabaja en la sede central del grupo, en Sabón (Arteixo) donde, sin embargo, no tiene tareas ejecutivas, cumpliendo el plan diseñado por su padre para llegar al liderazgo de la compañía desde abajo.

En el pasado se relacionó a la joven con los hijos de dos personajes conocidos: José Bono y José María Arias (presidente del Banco Pastor). También mantuvo una relación estable con el jinete Gonzalo Testa.

Con Sergio Álvarez Moya se la ha podido ver muy sonriente, esta semana, en el Concurso de Saltos Internacional de Barcelona. Y es que la pareja, además de compartir su vida, también comparte su pasión por la hípica.

Todos los datos que rodean la vida de la famosa heredera son bienes codiciados por la prensa rosa. Pero escasos. La joven es totalmente inaccesible para los medios de comunicación, y las pocas imágenes publicadas de ella se captan en sus concursos de hípica.