Podría parecer que Más vale solo que ciento volando es un monólogo de Edu Soto en el que se ha hecho un lío con el título. Sin embargo, sabidas las diferentes habilidades del polifacético artista catalán, es un espectáculo en el que habla, pero también canta y baila. Dice que le da miedo subirse solo a un escenario, pero aun así lo hará mañana en el Palau Altea.

Edu Soto dice sentir vergüenza e incluso miedo por verse solo ante el público. Para remediarlo ha ingeniado una serie de tretas, como disfrazarse encima del escenario y así parecer otra persona. Y una «ovación perfecta» para arrancar no le iría nada mal. Pero como es posible que aun así no se sienta totalmente liberado viéndose tan solo, lo más probable que es que baje hasta la platea y se mezcle con los espectadores. Así que cualquier asistente puede esperarse que el artista se ponga a su lado e incluso le invite a subirse al escenario.

¿Qué puede encontrarse el público a lo largo de este espectáculo? Pues a Edu bailando a su manera una pieza de danza contemporánea. También demostrará su capacidad para transformarse, incluso en algún bicho de los documentales de Félix Rodríguez de la Fuente. Hará de hipnotizador, buscará si hay algún memo en la sala... Todo eso y más.

Sus seguidores saben de las diferentes capacidades de este humorista, cantante, presentador, actor de musicales y teatro, un policefacético artista, que se dio a conocer hace años por su personaje del Neng de Castefa, en el programa televisivo de Andreu Buenafuente. Desde entonces, Edu Soto ha ido reinventándose con el paso de los años y ha sido Maestro de Ceremonias en el musical Cabaret o cocinero de ocasión en Masterchef Celebrity.