Basada en hechos reales, es la historia de cómo un empresario y surfero español de treinta y cinco años lucha por sobrevivir cuarenta y ocho horas sin comida y sin agua, con la cadera rota en tres partes y una terrible herida abierta en la mano, tras caer accidentalmente por un acantilado en Fuerteventura.

En palabras del director: «Solo es la increíble historia de Álvaro Vizcaino. Dos días y dos noches de dolor, angustia, soledad, alucinaciones y conocimiento personal. Rozando en varias ocasiones la muerte. Sin duda quiero mostrar esa fuerza interna del ser humano en momentos límites. Quiero contar esta historia, pero también la maravillosa interpretación que el mismo superviviente llegó a plantearse mientras se encontraba al borde de la muerte». Segundo largometraje de Hugo Stuven, que debutó en el largo en 2016 con Anomalou. La película ganó el Premio a la Mejor Película y al Mejor Actor (Lluís Homar) en el Festival de Marbella y el primer premio en el 13º Festival Internacional de Cine de Talca en Chile.Esta es la crónica de tres noches de dolor, angustia, soledad, alucinaciones y conocimiento personal. Rozando en varias ocasiones la muerte. Sin duda quiero mostrar esa fuerza interna del ser humano en momentos límites. Quiero contar esta historia, pero también la maravillosa interpretación que el mismo superviviente llegó a plantearse mientras se encontraba al borde de la muerte".

«Lo que me salvó -declaró el director--, lo que vine a descubrir, fue la aceptación». Dentro de esta terrible experiencia se muestra la transformación del hombre. Esa aceptación deja una impronta emocional que le modifica de alguna manera. Mi relación con Álvaro es muy estrecha. El y su hermana Irene son amigos de mi novia desde hace años. En cuanto le conocí y supe de su increíble historia, quise saber más. Santiago Lallana (co-guionista de Solo) y yo nos hemos reunido en varias ocasiones con él, manteniendo largas charlas sobre lo sucedido. Álvaro es una persona que atrapa desde el primer momento por su tranquila y apacible personalidad. Escuchar su historia con sus propias palabras te eriza la piel