Una secuela que estaban esperando infinidad de aficionados que disfrutaron de lo lindo en 2012 con la adaptación a la pantalla del inolvidable y encantador músical Mamma mía. Con un nuevo director, el inglés Ol Parker que solo había dirigido dos largometrajes, Rosas rojas (2005) y Ahora y siempre (2012) y con algunas incorporaciones al reparto, especialmente Cher, Andy García y Lily James, los espectadores han de estar preparados para volver a cantar y bailar, reír y llorar. Diez años después de que Mamma Mia! La película recaudara más de 600 millones de dólares en todo el mundo, es posible regresar a la mágica isla griega de Kalokairi para un nuevo musical basado en las canciones de ABBA.

Para hacer realidad este logro se hacía necesario nombres de la talla de la oscarizada Meryl Streep como Donna; Julie Walters como Rosie, y Christine Baranski como Tanya. Pero no sólo eso. También Amanda Seyfried y Dominic Cooper vuelven a formar pareja como Sophie y, finalmente, Pierce Brosnan, Stellan Skarsgard y el oscarizado Colin Firth retoman los papeles de Sam, Bill y Harry respectivamente, los tres posibles padres de Sophie. La película va y viene en el tiempo enseñándonos cómo nacieron las relaciones en el pasado para reanudarse en el presente.

Han pasado diez años desde el enorme éxito de Mamma Mia! y la productora Judy Craymer, que también creó el musical Mamma Mia!, habla de las bases de Mamma Mia! Una y otra vez: «El musical y la primera película -dijo- cuentan la historia de una familia y de una amistad, y dejan claro que uno debe creer en sí mismo. Ahora seguimos adelante con el emotivo viaje, al tiempo que descubrimos cómo las relaciones que se formaron en el pasado afectaron a Donna y a las Dínamos, a Sophie y a sus tres posibles padres».

«La historia de Mamma Mia! -añadió Craymer- me parece más relevante que nunca; el público siente un profundo cariño por la historia, el musical, la música de ABBA y la primera película... Las canciones y la historia nos llevan por un emotivo recorrido musical tan mágico como irresistible».

Los dos productores, Craymer y Gary Goetzman, tenían muy claro desde un principio que no debían apresurarse en lanzar la secuela. «La evolución de Mamma Mia! siempre ha sido algo orgánico», señaló Goetzmann. «Desde el principio nos atrajo la idea de una segunda entrega. Despojándonos de todo cinismo, decidimos regresar a los orígenes del musical porque nos pareció que había unos cimientos muy sólidos. Hablábamos a menudo de cómo el grupo Donna and Las Dínamos se había formado en la universidad y de cómo Donna había encontrado su destino en la isla. Así es como llegamos a la conclusión de que debíamos unir la precuela y la secuela».

Las canciones cobran una nueva vida al ser interpretadas por las jóvenes Dínamos. «Cuando oía a estas jóvenes cantar los temas, me sentía humilde y disfrutaba cada momento», dijo el productor ejecutivo Björn Ulvaeus. «Pero lo que más me sorprende es que esta canción, compuesta hace tanto tiempo, encaje tan bien en la película». El musical y la película han dado una relevancia a la música de ABBA que nadie podía imaginar.