Los guionistas y directores de comedias Abby Kohn y Marc Silverstein (Mejor... solteras, Nunca me han besado, Qué les pasa a los hombres) dan el salto a la dirección de largometrajes en esta cinta, una comedia que aborda la artificial importancia que se le da en la sociedad actual a la apariencia física, y cómo la actitud y la autoconfianza son la clave para estar satisfecho con uno mismo. Y quién mejor que la carismática actriz y comediante Amy Schumer (Descontroladas, Y de repente tú) para encarnar a una chica que, debido a un accidente, cambia la percepción que tiene de sí misma y deja de lado los complejos y las inseguridades. Le acompañan en el reparto Michelle Williams (El gran showman, Manchester frente al mar, Mi semana con Marilyn), la modelo Naomi Campbell (Zoolander 2, American Horror Story [TV]) y Lauren Hutton (La familia Jones, 54 (Studio 54), American Gigolo).

En Qué guapa soy una mujer que sufre de una aguda inseguridad y baja autoestima, que la coartan cada día, despierta de una brutal caída en una clase de ejercicios convencida de ser de repente una supermodelo. Con esta nueva confianza en sí misma se siente capaz de vivir su vida sin miedos ni complejos pero, ¿qué sucederá cuando se dé cuenta de que su aspecto no ha cambiado?

Cuando Renee Bennett se mira al espejo, ve a una mujer que no es lo bastante buena y que se siente invisible, con un trabajo estable, un apartamento decente y amigas fieles. Pero siempre ha soñado con más. Quiere ser guapa, la clase de guapa que es indiscutible, con todas las ventajas que conlleva. Una noche lluviosa, se siente inspirada tras ver la película Big, se dirige a un parque local, lanza una moneda a una fuente y suplica al universo que le conceda su mayor deseo: ser guapa.

Al día siguiente, decepcionada al ver que su deseo no se ha cumplido, decide ir a su clase de ciclo sala. El ambiente del gimnasio intimida bastante, pero se arma de coraje, fija la vista en su monitora y se concentra... hasta tal punto que se resbala del manillar, se estampa contra el suelo y se golpea la cabeza -no solo una, sino dos veces- antes de quedar inconsciente.

Al despertar, atontada, ensangrentada y sin un gran mechón de pelo, se lleva el susto de su vida cuando se mira en un espejo. Su deseo se ha hecho realidad. Por primera vez, puede decir «qué guapa soy» e ir en serio.

Lo que Renee no sabe es que su aspecto exterior no ha cambiado lo más mínimo. Para sus mejores amigas, Vivian y Jane , Renee tiene exactamente el mismo aspecto de siempre. Pero le siguen el juego porque la confianza y el carisma de la «nueva» Renee se han disparado. Y eso es bueno. Gracias a esa recién adquirida seguridad en sí misma, se lanza y conoce a un tipo estupendo, borda una entrevista de trabajo e incluso se apunta a un concurso de bikinis sin un ápice de miedo ni inseguridad.

Después de seis años en una mugrienta oficina en un sótano, Renee se une a la gente glamurosa en la sede central de la 5ª Avenida del gigante de los cosméticos Lily LeClair.