Su director lo define como un filme cómico, hecho con la idea de que «la gente se lo pase bien». De ahí que Víctor García León diga que han enseñado lo que vemos. «Hemos intentado hacer una foto y mostrar lo que hay, supongo que detrás de una foto también se puede ver lo que uno piensa de la vida y se refleja esa sensación económica, vital y social de que no hay salida. La intención no es hacer una película con moraleja, sino una foto». Película a concurso en el Festival de Málaga y en el de Alicante, donde obtuvo el Premio del Jurado y de la Crítica, es para sus autores «una alegoría subnormal de la política de España» y al mismo tiempo «una foto» o «radiografía» de la situación actual. Un chico de derechas y uno de izquierdas que luchan por una chica ciega, con la pretensión de «hacer una radiografía» de los tiempos actuales, sin «sacar una conclusión política».