En enero de 2018, Lamari dirá adiós definitivamente a Chambao. Será en un concierto en Madrid. Pero, asegura, lo único que cambia es el nombre porque María del Mar Rodríguez, es decir, Lamari, es desde 2005 Chambao. De momento, mañana llega a Alicante para ofrecer un concierto. A quienes les gusta su música, pueden llamarle como quieran.

Lamari vuelve como Chambao a Alicante con su gira Nuevo ciclo. ¿Por qué tendría que ir la gente a ese concierto?

Pues tendrá que ir porque le apetezca, yo soy muy mala vendedora. A quien le guste la música de Chambao tiene que estar allí. Habrá una selección de temas de los discos anteriores y otros del nuevo disco. Siempre lo hago así. Así que tienen que ir porque les apetezca pasar un ratito agradable. Cuando voy a un concierto no tengo ningún otro motivo que ver al grupo que me gusta.

Flamenco, pop, música étnica. ¿Hasta qué punto es importante para ti el mestizaje en la música?

A mí la música mezclada, la fusión, me gusta, me divierte y me enriquece. Siempre se aprende del otro.

Por eso has colaborado en discos con tantos amigos...

Sí. En realidad, hay gustos personales que te definen pero también hay gente que por lo que sea la escuchas, te ofrece hacer una colaboración y te haces seguidor también de esa persona y aprendes a trabajar de otra manera y con otras perspectivas. Eso me pasó con Ivan Lins, un brasileño, que tiene una voz superbonita y una gran trayectoria. Los ritmos brasileños no son fáciles y aprendes un montón de música.

¿Y qué música escucha Lamari?

De todo un poco. Desde música tradicional, música de los colegas que van haciendo sus proyectos, música que viste en un festival y no sabías quien era y lo añades... Desde música mediterránea, reggae, funky, flamenco, música en general de muchos lugares. Me gusta mucho la música africana, supongo que porque tiene más o menos que ver con mi oído de la música mediterránea.

Quince años dicen mucho de una marca, como es el caso de Chambao. Ahora Lamari suelta amarras, aunque Chambao ya eras tú desde 2005, y se convierte en Lamari a secas. ¿Por qué dar este paso?

Porque hace tiempo que tocaba, pero estaba en otras cosas. Como empecé en un grupo de tres personas en 2001, aunque en 2005 me quedé sola, al seguir con ese nombre la gente entiende que el grupo sigue y al no decir nada siempre tengo que hablar en plural, aunque la que compone soy yo y la que decide soy yo. Detrás hay una especie de ser que no existe., aunque ya he dicho muchas veces que Chambao era Lamari. Me molestas tanto estar hablando tanto de mí... parece que tengo un ego más grande que mi cuerpo, pero intento no alimentarlo mucho. Además que me aburre hablar de mí. Esto lo quito si obviamente soy Lamari. Y por honestidad porque no soy un grupo. Tampoco sabía qué nombre ponerme hasta que llegué a la conclusión de que soy Lamari. Intento ser honesta.

¿Cómo te ves en esta nueva etapa?

No tengo ni idea porque no sé qué saldrá en el siguiente disco que será el primero de Lamari. Llevo ya muchos años componiendo para Chambao. Así que seguramente haré algo que suene a Chambao porque soy Chambao, es solo un cambio de nombre, pero a ver qué sale. No voy a hacer algo que no sea yo.

¿Cómo ve a Lamari en los comienzos de Chambao en 2002 y cómo ve a Lamari en 2017?

Pues igual pero más vieja. Sigo siendo la misma. Igual que cualquiera. A nivel musical he colaborado en muchos proyectos, he conocido un montón de gente que me ha enriquecido tanto en aprender nuevas manera de currar como en amistad. Si he crecido a nivel musical lo tiene que decir el público. Yo puedo decir que he aprendido a querer la vida y a quererla.

FICHA

Sábado 22 de abril 22 horas

Sala The One San Vicente

Entrada 18 euros