El comienzo del nuevo curso escolar está a la vuelta de la esquina y con ello el dilema de qué hacer con nuestros hijos cuando se acaba la jornada lectiva. Esta es una decisión muy importante que los padres deberían meditar conscientemente ya que, según cómo destinen esas horas extraescolares, los niños y adolescentes guiarán su comportamiento y su rendimiento. Por ello, es vital motivarles con una actividad acorde a sus gustos.

Si nuestros hijos necesitan refuerzo con algunas asignaturas está bien apuntarles a clases de apoyo que les ayude a lidiar con soltura esa asignatura que se les atraganta, pero es importantísimo no saturar a los niños con más clases. Debemos tener en cuenta que pasan seis horas diarias aprendiendo por lo que unas horas de ocio y diversión son claves para despejar su mente y dar rienda suelta a su creatividad.

Un recurso muy popular cuando hablamos de clases extraescolares es optar por algún deporte o instrumento pero lo cierto es que hay muchos a los que no les llama la atención estas ramas y entonces ¿qué otras opciones tenemos?

Cada vez se están haciendo más populares las clases con algún elemento audiovisual como la radio o clases de teatro y es que los beneficios y el aprendizaje que obtienen los pequeños asistiendo a estas actividades no puede ser mejor. Pasando un buen rato en compañía de niños de todas las edades, los más jóvenes aprenden a desenvolverse en diferentes ambientes: frente a un micrófono o sobre un escenario, lo que les aporta entre otras cosas soltura, seguridad y dotes comunicativas, tres aptitudes clave para su futuro escolar y laboral que tus hijos podrán adquirir pasando unas pocas horas a la semana.