Dos años antes de que terminara la década de los setenta sonaba por primera vez en las calles de Rojales el parsimonioso redoble de las marchas moras. La comparsa Almohades nacía con las fiestas y un año después lo hacían los Tuareg, comparsa que este año celebra su cuarenta aniversario. Este municipio celebra las próximas semanas sus fiestas patronales en honor a San Pedro y las de moros y cristianos. Una de las fiestas de moros y cristianos decanas de la comarca de la Vega Baja. No solo su antigüedad marcan su espectacularidad sino también se alimentan del arduo trabajo de las siete comparsas que componen las fiestas y que se traducen en emblemáticos desfiles protagonizados por Contrabandistas, Guerros del Cid, Piratas, Benakíes, Bereberes, Tuareg y Almohades, comparsa que este año ostenta la sultanía.
Los elementos arquitectónicos, valores únicos en la comarca, en los que se desarrollan los festejos alzan aún más si cabe los emotivos y multitudinarios actos. El puente de sillería, del siglo XVIII, marca, como viene haciendo en estás más de cuatro décadas, el epicentro de unos majestuosos desfiles y la eclosión de las distintas filás que el próximo sábado 6 y domingo 7 de julio cruzarán a través de él las aguas del Segura. El río, omnipresente para el desarrollo del municipio ya para los íberos, romanos y árabes también lo es para las fiestas. Con un marco inmejorable la batalla de la pólvora y la toma del castillo queda flanqueada por el río y el puente. El Malecón del Soto acogerá el jueves 4 de julio este acto cargado de pólvora y espectaculares bailes.
Pero antes de llegar a estas citas, numerosos actos están programados para todos los públicos. Esta noche el protagonismo lo acapara el fuego que recorrerá las calles del municipio de manos del Correfoc para concluir con la cremá de la hoguera que este año la protagoniza las historias y leyendas de Rojales. Una leyenda viva que además se escenificará en el Cabezo Soler el domingo, su entorno donde según las lenguas tuvo lugar. Actuaciones musicales, actividades para los más pequeños y los actos religiosos católicos enmarcados en la ofrenda, misa y procesión en honor al patrón de municipio componen el resto de actos.
Jesús Martínez Pascual
Concejal de Fiestas
«La esencia es la convivencia y la hospitalidad»
El pasado sábado, Jesús Martínez tomaba posesión de su acta de concejal en el Ayuntamiento de Rojales, convirtiéndose en uno de los concejales más jóvenes en un equipo de gobierno de los municipios de la Vega Baja. A sus 24 años, Jesús conoce bien las dos caras de los festejos. Por un lado como coordinador, labor que ha desarrollado en los últimos cuatro años en la concejalía de fiestas y por el otro como festero. Martínez Pascual repasa las novedades y las características que distinguen a las fiestas de moros y cristianos de Rojales desde el prisma de estar al frente de la concejalía de fiestas sin olvidar el inherente carácter que le une a ellas, como festero.
Aunque desde hace años trabajas en la organización de las fiestas, ¿cómo afrontas este primer año al frente de la concejalía?
Lo afronto con algún que otro nerviosismo, desde hace muchos años estoy involucrado en las fiestas de Rojales. Estos cuatro años atrás he sido el coordinador de la concejalía, pero este año es especial. Es mi primer año como concejal de Fiestas y estoy seguro que los rojaleros y rojaleras lo pasarán en grande con todos los actos que la concejalía ha preparado para ellos.
¿Cuál es la esencia de las fiestas de Rojales?
Para mí la esencia de las fiestas es la convivencia que hay en las diferentes kábilas, el ambiente de hospitalidad que se respira estos días de fiesta, la música, los desfiles de moros y cristianos… En general, la esencia es la gente, que hace que las fiestas de Rojales año tras año sean un referente y vayan en auge.
¿Qué novedades se presentan este año?
Este año desde la Junta Central de Moros y Cristianos y la concejalía de fiestas hemos organizado una gimkana entre las diferentes comparsas. Queremos con esto crear un día de convivencia entre todos y disfrutar de una jornada de hermandad en la que se podrá degustar de una paella gigante. Además el día del patrón, sábado 29 de junio, vamos a instalar en el Malecón del Soto un tobogán acuático de 15 metros.
Conoce desde dentro la fiesta. ¿Qué acostumbra la gente a no perderse?
La gente no se pierde los espectaculares desfiles de moros y cristianos, así como los bailes que se celebran en las diferentes kábilas. Tampoco faltan al gran chupinazo, como quedó demostrado el pasado domingo, y que llevamos celebrando desde hace cuatro años. Son días en los que la diversión no falta en Rojales.
¿Cómo festero con qué acto te querdarías?
Es muy difícil quedarse con un solo acto ya que tenemos programados más de una cincuentena. Me quedaría con el día de la charanga, viernes 5 de julio, y con los desfiles, -sábado 6 y domingo 7 de julio- son la mejor imagen que muestra que los rojaleros y rojaleras sabemos pasarlo bien y hacer disfrutar a la gente que nos visita.
