Sabor y aroma del verano en Monforte Del Cid

El barrio de San Roque de Monforte del Cid reúne a los vecinos en un amplio programade actividades que se cierran el 16 de agosto con la procesión en honor al patrón

Mariví Pardo

09·08·18 | 22:24

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Sabor y aroma del verano en Monforte Del Cid

Vivir las fiestas de San Roque de Monforte del Cid es disfrutar del verano con toda la intensidad de un mediodía estival, en el que resguardarse del sol bajo un toldo en plena calle, donde se escucha el sonido de la chicharra y el bullicio de las conversaciones con los amigos con la compañia del anís transformado en canarios y palomas.

Anís, agua y mucho hielo son los ingredientes esenciales para la elaboración de la tradicional bebida de «la paloma» que, mezclada con un chorro de jarabe de limón, se transforma en «el canario». Dos bebidas sin las que no se entienden estas fiestas que mantiene intacta esta costumbre a pesar de que el gusto por estos licores se ha modificado en las últimas décadas.

Las fiestas de San Roque han sido consideradas desde siempre como las fiestas de verano de Monforte del Cid. Giran alrededor de la imagen de San Roque que, desde la Ermita que preside el barrio y que data del siglo XVIII, recibe a monfortinos y monfortinas con sus tradicionales ramos de alhábega. Así, el barrio acoge estos días actividades para todas las edades que hacen que estas fiestas unas de las celebraciones más populares, con una gran historia que se remonta al siglo XIX.

Las actividades se concentran a primera hora de la mañana, a las 13:00 horas y luego hay que esperar que descienda el sol para salir a la calle de nuevo y entonces es el momento de los juegos tradicionales para los más pequeños. Cuando el astro rey desaparece y con el descenso de temperaturas, las calles se llenan de bullicio con verbenas o el concierto de la Sociedad Musical «La Lira».

Las más populares

En el programa figuran como actividades más populares el Cross Popular de San Roque, que premia a sus ganadores con generosas cantidades de uva y la procesión del santo, que da por concluidas las fiestas el 16 de agosto, en el día de su festividad.

Desde el día 9 de agosto, con la puesta de banderas, hasta el día 16 con el disparo del castillo de fuegos artificiales que cierra las fiestas, el barrio de San Roque se envuelve en tradiciones que se remontan a muchos años atrás. No se sabe con exactitud la antigüedad de estas fiestas, que además de la advocación a San Roque y según la historia, estas fechas festivas eran aprovechadas por los monfortinos ausentes para acudir al pueblo ya que por San Roque se iniciaba siempre la campaña de la uva, que terminaba a primeros de año.