Todos los años, a inicios del mes de junio, el mundo de las Hogueras se reúne en torno al Monumento del Foguerer para rendir homenaje a los foguerers y barraquers fallecidos. Una iniciativa que, desde el año 1982, lleva realizándose sin interrupción y que supone uno de los primeros actos de las Hogueras del año.

El encuentro, que este año tuvo lugar el 1 de junio, tiene lugar en los alrededores de la Plaza de España donde está ubicado en Monumento al Foguerer de Alicante, una escultura que fue inaugurada oficialmente el 21 de junio de 1982 y cuya primera piedra se colocó el 17 de enero de 1982, día de San Antón.

Desde entonces, este punto de la ciudad se ha convertido en el lugar de encuentro para homenajear a los festeros, siendo Alicante el primer municipio de la Comunitat Valenciana que cuenta con una escultura para sus festeros.

En el acto de homenaje al foguerer y barraquer, la familia de las Hogueras se reúne para agradecer el trabajo de los festeros fallecidos y su forma de vida en favor de las Hogueras, poniendo en valor su trabajo, esfuerzo y sacrificio. Además, los fallecidos en el último año reciben un emblema a título póstumo como reconocimiento.

Con posterioridad a este acto de homenaje tiene lugar el desfile del Pregón, cuyo recorrido atravesó este año la calle de San Vicente, Rambla de Méndez Núñez, Rafael Altamira y Plaza del Ayuntamiento. A continuación, Asunción Martínez ofreció el pregón oficial de las Hogueras.

Un intento de monumento fallido en 1972

En 1972, el Ayuntamiento de Alicante encargó al escultor Jorge Oteiza el diseño y construcción de una obra dedicada al foguerer que debía ubicarse en la Plaza de España y en los aledaños de la Plaza de Toros, el Panteón de Quijano y el Paseo de Campoamor.

En su propuesta, Oteiza defendía que el monumento debía superar la escala ornamental y ofrecer al ciudadano un nuevo centro monumental como cualificación del espacio urbano y que diera respuesta a las necesidades de enriquecimiento espiritual.

Según se recoge en la publicación Oteiza en Alicante. El monumento al foguerer, 1972 elaborado por Martín Noguerol y Joan Calduch dentro de la Colección Cuadernos del Museo Oteiza y en colaboración con el Ayuntamiento de Alicante y el MACA, Museo de Arte Contemporáneo de Alicante, el escultor manifestó: «La escultura activa es toda la plaza, el monumento es con toda la plaza, una estructura de relaciones abierta y practicable, espiritualmente coherente, simbólica, urbanística, cívica, funcional».

Sin embargo, las expectativas del autor no eran acordes con las que tenían el ayuntamiento y pronto empezaron las divergencias entre las dos partes a la hora de entender esta obra pública. El desencuentro entre las limitadas expectativas municipales y la visión global del artista condujo a que se abortara el monumento al Foguerer tal como lo concebía el escultor.