Coincide la celebración de este 9 d’Octubre, fiesta cívica y de exaltación de la identidad del pueblo valenciano, con la elocuencia de las cifras ofrecidas la semana pasada por María Jesús Montero, ministra de Hacienda: cada habitante de la Comunidad percibe del Estado 800 euros menos que el de Cantabria, la autonomía mejor financiada.

Estos datos los hizo públicos la responsable de las cuentas del Estado un día después del encuentro que el president Ximo Puig mantuvo con el presidente Pedro Sánchez en la Moncloa, en el que uno de los principales asuntos abordados fue la asfixia financiera que llevamos soportando muchos años, y sobre la que parece haberse abierto un rayo de esperanza.

Desde que tomé las riendas del gobierno municipal en junio de 2015, cada 9 d’Octubre y en otros muchos foros, vengo reclamando no solo la mejora de la financiación autonómica, que sin duda repercutirá positivamente en los municipios, sino también la urgente necesidad de favorecer y propiciar una auténtica autonomía financiera municipal.

El 9 d’Octubre atesora un valor simbólico extraordinario porque la entrada en Valencia del Rey Jaume IRey Jaume I en 1238 llevaría a la colocación de la primera piedra de un ambicioso proyecto político que condujo a la creación de un nuevo Reino. Y dando un gran salto en el tiempo, llegaríamos a 1977, el año en el que miles de valencianos se lanzaron a las calles en una manifestación unitaria para exigir el nuevo Estatut d’Autonomía.

Con el mismo empeño que se recuerda la reclamación del Estatut en pleno nacimiento de la democracia, debemos continuar exigiendo, con una sola voz, esa justa financiación, tanto para la Comunidad como para los ayuntamientos, que nos permita dejar de estar siempre en la cola del Estado, como corroboran las estadísticas y ha constatado la ministra de Hacienda, que ha llegado a calificar la situación de “inexplicable”.

La urgente necesidad de nuevos ingresos para la Comunidad Valenciana mediante un sistema que recupere el equilibrio y la solidaridad territorial se puede hacer extensible también al ámbito local. Los ayuntamientos hemos pasado un período de enormes dificultades económicas con normativas de estabilidad presupuestaria que han ahogado la gestión diaria y que, afortunadamente, con el nuevo gobierno del presidente Pedro Sánchez han encontrado un respiro al permitir dedicar el superávit a inversiones financieramente sostenibles en vez de destinar el cien por ciento a amortizaciones de deuda.

Pero debemos profundizar mucho más en esta reivindicación con una reforma del marco jurídico de las haciendas locales para dotar a los ayuntamientos de mejores y más amplios recursos financieros. No debemos olvidar nunca que la administración municipal es la más cercana a los ciudadanos, la que se ocupa de cubrir sus necesidades básicas impulsando las políticas sociales, generando oportunidades de empleo o acometiendo proyectos de futuro y captando inversiones de empresas de la nueva economía, como en nuestro caso por ejemplo con el Campus Tecnológico o la ampliación de Elche Parque Empresarial, para no perder el tren del futuro.

Felicito efusivamente a todos los/las premiados en este 9 d’Octubre, a los deportistas José Oliver Hernández, Manuel Sánchez Aldeguer, Kiko Martínez, Francisco José Lozano Ortega y Francisco Martín por su indudable valía deportiva; a las hermanas Hèlia y Alicia González Beltrán, dos niñas que el 28 de marzo de 1939 embarcaron en el puerto de Alicante en el carguero inglés “Stanbrook”; y al elenco de la laureadísima producción teatral “Presas”, dirigida por José Luis Mas, a quienes tendremos el honor de distinguir con la Medalla de Plata del Bimilenari. Así como a la bailarina, actriz, maestra y coreógrafa Pilar Sánchez Martínez, a quien otorgaremos el Ram d’Or d’Elx, en el acto institucional que celebramos en el Gran Teatro, y al que están invitados todos los ilicitanos e ilicitanas.

Un encuentro festivo en el que echaremos una mirada a nuestra historia para recordar de dónde venimos y hacia dónde vamos, pero también para exigir soluciones a este problema crónico de la financiación autonómica y municipal, porque como acertadamente dijo la ministra de Hacienda al exponer la situación que atenaza y limita las posibilidades de la Comunidad Valenciana “solo se puede tener una verdadera autonomía política cuando se tiene autonomía financiera”.