La actividad de óptica entendida desde el punto de vista de un farmacéutico, como servicio sanitario que es, encaja perfectamente como rama de actividad a desarrollar por los farmacéuticos, donde intentamos diferenciarnos del resto de establecimientos de óptica aplicando los mismos los protocolos sanitarios que ya implantamos en la oficina de farmacia.

Así pues nuestro primer objetivo es velar por la salud visual, quedando en segundo plano el resto de aspectos de la actividad, que aunque importantes, no son los que determinan la relación con nuestros pacientes. Dentro de los servicios que se ofrecen desde la óptica cabe destacar el seguimiento y control de la tensión ocular, tan importante para los pacientes con glaucoma o las revisiones de la vista, para detección de cataratas y las revisiones el oído para adaptación de audioprótesis.