Los datos del Instituto Nacional de Estadística, recogidos por el portal interempresas.net, aseguran que más de un 16% de la población sufre problemas de ruido procedentes de los vecinos o del exterior de sus viviendas.

El 80% de las viviendas en España padecen deficiencias en materia de aislamiento acústico, de manera que algunos de los ruidos más comunes como las pisadas, movimientos de muebles o las conversaciones en el piso superior, los gritos en el portal e incluso el volumen de la televisión del vecino de al lado, alteran frecuentemente la tranquilidad en el hogar.

Es necesario el empleo de soluciones integrales para la construcción sostenible, ya que localizando las fuentes del ruido se puede instalar la solución más adecuada llegando a reducir estos sonidos molestos en el hogar hasta en un 70%.

Los ruidos más molestos para los vecinos en cifras

Entre las conclusiones del estudio se destaca que un 21% de estos ruidos procede del tráfico y otros ruidos de la calle. Y es que las sirenas de las ambulancias, el trasiego de motos y coches, las carcajadas, las conversaciones o la música del bar de al lado traspasan paredes y ventanas.

Las conversaciones de los vecinos suponen la segunda causa más molesta en las viviendas españolas, representan un 20% de los ruidos, según los expertos.

Como se dice, es verdad el dicho de que «las paredes hablan» y no porque los vecinos conversen a gritos, que también puede ser el caso, sino porque las construcciones actuales, la mayoría anterior a 2009, filtran las conversaciones a un tono normal, lo que hace que parezca que los vecinos se encuentren en el mismo salón de casa.

Por su parte, las pisadas y movimientos de muebles en el piso superior suponen el tercer ruido más incómodo representando un 16% de los sonidos que se oyen en las viviendas.

Los equipos de música o televisión que ha incorporado el sonido envolvente típico de los cines constituyen el 13% de los ruidos en las viviendas.

Los sonidos emanados por las cisternas, tuberías y cañerías representan también alrededor del 9% de los ruidos del hogar.

La sala de calderas y el ascensor supone un 7%.

Pas pisadas, carreras, portazos o los gritos en el portal representan un 5% de todos los ruidos que se producen en las viviendas.

Y, en contra de lo que se pueda pensar, los sonidos que producen las mascotas, como puede ser el ladrido del perro del vecino, solo aportan el 1% de los ruidos que se soporta en las casas.

Del mismo modo, el molesto sonido que provocan los electrodomésticos en funcionamiento sólo supone el 1%.

Por último, no hay que olvidar unos ruidos tan habituales en las viviendas como los que generan las obras de nuestros vecinos, los cuales, dado su carácter temporal no hay manera de prevenir.