Son las 03:15 horas de una madrugada invernal. Duerme la ciudad. Un vehículo está aparcado ante la vivienda de su propietario. De repente, comienza a arder. La luz de las llamas despierta a los habitantes de la vivienda. Inmediatamente, telefonean a Emergencias. El Consorcio Provincial de Bomberos moviliza al Parque correspondiente, que a toda velocidad se pone en marcha, conscientes del peligro que entraña este tipo de incendios.

Las tareas de extinción concluyen en torno a las 4 de la madrugada. El propietario del vehículo no se explica qué ha podido pasar. Es uno de los primeros incendios de automóvil de 2018.

Los incendios de vehículo han pasado constituir el tipo de intervención más numeroso de los bomberos del Consorcio en materia de tráfico en 2017. De un total de 842 intervenciones, 358 se debieron a ese motivo.

Una cifra que supera ampliamente los registros de 2016, cuando hubo 136 incendios de vehículo de un total 760 intervenciones relacionadas con el tráfico.

Estas estadísticas conducen a hacernos una pregunta: ¿por qué se queman los coches?

Las causas más comunes responden a dos cuestiones. Una, de origen eléctrico. El cortocircuito en el sistema. Otra, relacionada con una posible fuga de combustible sobre la parte caliente del motor, que produce el fuego. No son las únicas.

Tampoco es necesario que el coche esté en marcha. Basta con que esté caliente. De ahí, que un vehículo estacionado pueda arder.

Los vehículos de mayor tonelaje (camiones) incluyen, además, una tercera causa: el calor que generan los frenos al quedarse cogidos. Ese calor tiende a propagarse y es causa de incendio.

El incendio de vehículos, como todo tipo de fuego, puede tener, además, consecuencias aún peores. Si el coche se incendia en una zona próxima a matorral, puede transmitir las llamas a ese matorral y derivar en un incendio de vegetación o, incluso, en un forestal. Esta circunstancia no es nueva. De hecho, los bomberos del Consorcio ya han tenido que hacer frente a intervenciones de este tipo, como sucedió hace unos meses en una glorieta.

El fuego de un vehículo también puede propagarse en una zona urbana. Los bomberos han tenido que enfrentarse, de hecho, al fuego de una vivienda originado por un vehículo. Fue durante un verano. El coche ardió junto a un local que tenía abierto el toldo. Las llamas pasaron del vehículo al toldo. Y, de ahí, saltaron por una ventana abierta al interior de una vivienda.

Otro tipo de transmisión de incendio se produce cuando un coche arde y tiene cerca a otros vehículos. Hace unos meses, los bomberos del Parque de San Vicente del Raspeig intervinieron ante la alarma que causó un vehículo en un parking de la Universidad de Alicante, de cuyo motor salía humo pese a estar parado y sin contacto.

Un guarda jurado dio la alarma. En aquella ocasión, el sargento pensó que algo extraño ocurría. Consiguieron abrir el capó. Sobre el motor, había un paño olvidado. De haberse quemado, el efecto podría haber sido devastador para los coches estacionados en ese aparcamiento.

Los nuevos retos

Los nuevos retosLos nuevos tiempos también han traído nuevos retos en materia de extinción de vehículos?, y nuevos peligros. En el caso de los vehículos híbridos, el riesgo añadido llega como consecuencia del voltaje eléctrico, lo que hace necesaria la desconexión del sistema.

También, la evolución en los nuevos materiales conlleva un nuevo reto, como consecuencia de las aleaciones de aluminio. Agua y aluminio no casan bien y al encontrarse la reacción puede resultar violenta, por lo que el uso del espumógeno ha crecido en importancia a la hora de apagar las llamas.

Acción-Reacción

Acción-ReacciónPero, ¿qué hacer cuando vamos en el coche y comienza a arder. El consejo del bombero es claro: lo primero, es parar y dejar el vehículo estacionado. A continuación, llamar al 1-1-2 para que alerte a los bomberos. De inmediato, utilizar un extintor o solicitarlo si es posible, porque suele resultar muy efectivos en los momentos iniciales. Es muy importante que usted no corra riesgos inútiles.

¿Esta intervención se paga?

¿Esta intervención se paga?Como siempre, antes de entrar en materia, subrayamos la importancia de contar con un seguro completo que incluya esta contingencia, lo que nos evitará problemas.

No obstante, en el caso de que el vehículo haya resultado siniestro total, el Consorcio solicitará el documento de baja total del vehículo para eximir del pago.

Además, quedan exentas las rentas familiares inferiores a 22.000 euros anuales. Como siempre, el objetivo del Consorcio es que al problema que supone que su coche se queme no sumemos el de la preocupación por el pago. De ahí, que realicemos estas recomendaciones para que, pase lo que pase, duerma usted tranquilo.

Premios del Concurso Nacional de Fotografía de empleados del Consorcio

Premios del Concurso Nacional de Fotografía de empleados del ConsorcioJosé Pérez Dorado, José Valero Sánchez y Angel Suárez Iglesias obtienen los tres primeros premios del Concurso Nacional de Fotografía en la categoría de empleados del Consorcio

José Pérez Dorado, José Valero Sánchez y Angel Suárez Iglesias son tres bomberos del Consorcio Provincial que, además de excelentes profesionales son auténticos maestros en el arte de la fotografía. Sus imágenes «Danza de Altura» (Pérez Dorado), «El maestro de zahoríes» (Valero Sánchez) y «Nit de Cendres» (Suárez Iglesias) han obtenido, respectivamente, el primer, segundo y tercer premio de la categoría del 2º Concurso Nacional de Fotografía de Bomberos dirigida a empleados del Consorcio Provincial para el Servicio de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamento de Alicante. Premios dotados, por orden, con 300, 200 y 100 euros y diploma.

En su conjunto, el concurso ha sido un completo éxito de participación, con imágenes de gran calidad, que han hecho realmente difícil la decisión del jurado compuesto por Inés Gil Herrera, Laura Medrano y Roberto Ruiz.

El primer premio, dotado con 500 euros y medalla de plata de la Federación Levantina de Fotografía ha sido para Francisco Javier Domínguez por «El poder del Grupo». El segundo, para Carlos López con «Mano», dotado con 300 euros y medalla de bronce. El tercero, ha recaído en Sergio Enríquez por «El Coloso en llamas», dotado con 150 euros y medalla de bronce.

Además, se han concedido seis menciones de honor a: Alvaro Sangregorio, por «Bombero», Alex Domínguez, por «Esqueleto», Jon González, por «Reflejo», Carlos Garnacho, por «Valor ante el trabajo», José Amérigo, por «Compañeros» y Felipe Noguera con «Desde el aire».

El 2º Concurso Nacional de Fotografía de Bomberos está organizado por el Club Esportiu Bombers Provincials d´Alacant. Cuenta con la colaboración del Consorcio Provincial de Bomberos y de una docena de firmas colaboradoras.

Las imágenes ganadoras en cada categoría y las de las menciones de honor pueden verse en la página fotobomberos.org y en el Facebook de bomberos de la Dipu.