Hasta el 7 de enero se podrá ver en el MARQ la exposición "Mayas. El enigma de las ciudades perdidas", inaugurada el pasado jueves. Los objetos que acompañan a esta magnífica muestra y que están representados por cerámicas, bellas estatuillas de barro o colosales esculturas, serán los que nos ayuden a ilustrar aspectos destacados de la vida cotidiana de los mayas, de sus ritos, sus preocupaciones o incluso sus deseos.

La arquitectura monumental de las pirámides, los secretos de la escritura jeroglífica, el comercio, la agricultura y el desarrollo de las grandes ciudades, los estamentos de la sociedad o el interés por las matemáticas y la astronomía son solo algunos de los aspectos que aborda la nueva exposición internacional del MARQ, "Mayas. El enigma de las ciudades perdidas". Los mayas se han acomodado ya en el Museo Arqueológico Provincial, donde permanecerán durante más de seis meses para descubrir a los visitantes los enigmas de una de las civilizaciones milenarias más misteriosas e interesantes de la humanidad.

Entre las 191 piezas que forman "Mayas. El enigma de las ciudades perdidas" destacan las grandes estelas con jeroglíficos en las que los mayas relataban su historia, algunas de ellas de dos metros de altura y más de dos toneladas de peso, como las de Calakmul o Cancuén, considerada una auténtica joya con más de 600 giflos; o los altares que son igual de grandes, pero con forma circular; o el fragmento de un trono que, sin montacargas, han tenido que mover 12 personas. A estas espectaculares piezas se unen joyas, cerámicas y objetos.

Las casi 200 piezas que forman esta exposición reúne una importante colección de piezas del Museo Nacional de Arqueología y Etnología de Guatemala y dos instituciones guatelmatecas como son la Fundación la Ruta Maya y la Colección Neria Herrera del Museo Juan Antonio Valdés, que en su mayoría nunca antes han sido expuestas en Europa. Como complemento, la muestra contará también con piezas mayas procedentes de museos europeos como el Museo de Etnología de Berlín o el Rautenstrauch Joest Museum de Colonia, destacando sin duda como pieza de alto valor la "Estela de Kalacmuk".