La comarca de la Marina Baja cuenta con una superficie de 579,63 km2; los municipios consorciados representan en superficie el 41,15 % en habitantes y en consumo aproximadamente el 97 % del total de la comarca.
El Consorcio es una administración pública local, que se gesta tras la sequía del año 69 pero se constituye oficialmente el 28 de octubre de 1977, su personal es funcionario propio y además cuenta con funcionarios adscritos de sus administraciones. Está integrado, actualmente, por siete municipios: Benidorm, Villajoyosa, Alfaz del Pi, Altea, La Nucia, Finestrat y Polop, que junto con la Confederación Hidrográfica del Júcar y la Diputación de Alicante ejercen la función de coordinación hídrica y coordinación territorial respectivamente, ambos participan pero no aportan económicamente ni participan patrimonialmente. La función de esta entidad es gestionar los diferentes recursos para garantizar el abastecimiento de los municipios que lo integran.
¿Parece que la sequía queda ya olvidada después de las últimas lluvias?
En la actualidad evidentemente se ha recuperado todas las reservas superficiales y subterráneas pero no hay que olvidar que hemos pasado por la peor sequía hasta la fecha. El periodo 2014-2016 sin duda es el periodo más seco que ha atravesado esta comarca desde el año 1950, año donde se dispone de datos fiables. El año 2014 con 141,3 l/m2 es el segundo año más seco de esta serie después del año 1983 (156 l/m2). La gran diferencia, en cuanto a periodos secos, es que en éste último periodo se han encadenado tres años secos seguidos por debajo de los 350 mm., algo que no había ocurrido, ni siquiera en la última sequía 1999-2001.
¿Qué representan los aportes exteriores y qué diferencia de aporte exterior entre esta sequía y la anterior?
Los aportes exteriores del sistema han sido fundamentales, la Conducción Fenollar-Amadorio se pone en marcha en el año 1997 y no es hasta mayo del año 1999 cuando entró en servicio. Esta conducción de trasvase entre cuencas ha sido fundamental para garantizar el agua a los usuarios tanto en la anterior sequía como en esta. La sequía de 1998-2001, a la Comarca llegó un caudal de 26,8 Hm3 efectivos de agua procedente del Sistema Júcar, mientras que en ésta última (2014-2016) han llegado 10,1 Hm3 de agua desde la Desalinizadora de Muchamiel, de acuerdo con el criterio de la CHJ. La diferencia en volumen a pesar de que la última sequía ha sido más dura se debe al mayor número de infraestructuras nuevas y renovadas que ha permitido reducir la demanda y por tanto optimizar y generar nuevos recursos adicionales en el sistema.
Este modelo que empezó en los años 70 con la infraestructura de la impulsión del Algar y la conducción de Guadalest de distribución a las poblaciones, inicialmente puesto en marcha por el Ministerio y posteriormente con la Dirección de Don José Ramón García Antón, ha marcado la pauta con la continua creación de nuevas infraestructuras que ha desembocado en el Modelo Marina Baja, que se sustenta en: infraestructuras de regulación superficial (Embalses, Conducciones y estaciones de bombeo), de regulación subterránea (Acuíferos Algar, Beniarda, Polop y Aitana Sur) e infraestructuras de reutilización (Conducciones y estaciones de bombeo desde las EDARs de Benidorm, Altea y Villajoyosa).
¿Cuál es el estado de la Conducción Fenollar-Amadorio?
La Conducción FA es una conducción que funcionó correctamente en la sequía de 1999-2001, pero en la actual sino hubiese sido por la reparación de emergencia de aproximadamente el 50% de la conducción efectuada en el primer semestre de 2016 por la Confederación Hidrográfica el Júcar seguramente el agua no hubiese podido llegar a la Marina Baja. En el verano del año 2015, en cuatro meses se tuvieron 27 averías. Se trata de una conducción que está muy deteriorada, posiblemente por el mantenimiento o la ejecución inicial y que no ha agotado el periodo de su vida media y que el Consorcio ha solicitado de forma reiterada al Ministerio que se sustituya el otro 50% y se entregue la obra a este usuario para su mantenimiento.
Bien, además de la continua creación y mejora de infraestructuras, yo diría que este modelo se apoya en los acuerdos y convenios con las Comunidades de Regantes, convenios que fue pionera esta entidad pública en su implantación y permite el intercambio de las aguas, de aguas blancas por aguas regeneradas y que sin duda permite una gestión optimizada de los recursos que se traduce en una garantía para los usuarios de abastecimiento y riego y a diferencia de otros modelos ha creado una franja con franja verde agrícola paralela a la costa y que a su vez es fundamental para el medioambiente y el turismo de la Comarca. Aprovecho para agradecer la gestión de los regantes en esta última sequía, a lo Regantes del Canal Bajo del Algar, Villajoyosa y Altea por el uso del agua regenerada, a la Comunidad de Regantes de Callosa y a la Comunidad de Regantes de Polop y La Nucia.
¿Pero que aportan estas Comunidades de Regantes al modelo del Consorcio?
Además de lo comentado anteriormente, todos ellos en estos últimos 15 años han realizado un enorme esfuerzo con obras de modernización en los regadíos y también el Consorcio ha realizado obras para las Comunidades de Regantes que junto a las propias del Consorcio han permitido reducir los consumos propios y por ende disponer de más recursos adicionales para el abastecimiento. Todas estas infraestructuras realizadas junto con las propias de las poblaciones Consorciadas han permitido que los consumos de abastecimiento actuales sean similares al del año 2000. Este hecho ha provocado que los consumos actuales que se contemplan en el actual Plan Hidrológico estén totalmente desfasados.
¿Qué han supuesto estas lluvias en la comarca de la Marina Baja?
El balance de estas lluvias es enormemente positivo, si bien no debemos olvidar que han producido daños importantes en infraestructuras de abastecimiento y riego y también en la agricultura. Pero estos episodios torrenciales de lluvia suelen ser así en la comarca aunque no es habitual ni la intensidad del último episodio de enero, ni la época del año en la que han caído.
No debemos olvidar que a principios de diciembre del año pasado nos enfrentamos a un año 2017 muy difícil: con unos embalses vacíos (Guadalest con 2 Hm2) y (Amadorio 0,5Hm2), próximos al nivel de fangos, los acuíferos de Algar y Beniarda, los más importantes de la comarca en cotas mínimas históricas y los acuíferos de Polop y Aitana ligeramente mejor. La previsión era traer hasta 7,5 Hm2 de aporte exterior con un coste muy importante y explotar acuíferos a cotas inéditas.
A mitad de diciembre se produjo un primer episodio de lluvias (375 l/m2), y a mitad de enero otro episodio extremo en cuatro días se recogieron (522,5 l/m2). El primer episodio produjo una recuperación parcial de los recursos superficiales y subterráneos y el segundo episodio ha permitido la recuperación total de las reservas subterráneas y superficiales y el alivio de las presas de Amadorio y Guadalest y del azud del Algar. Guadalest a fecha de hoy está aliviando cerca de 1m3/s, Amadorio 4m3/s y el Azud del Algar 7m3/s. Estos volúmenes se podrían llevar al sur de la provincia de Alicante si la conducción Fenollar-Amadorio fuera reversible, algo que se ha solicitado por el Consorcio.
¿A qué se debe esta diferencia pluviométrica en esta Comarca?
Esta Comarca tiene prácticamente dos espacios diferenciados que van de noroeste a sureste, con una divisoria natural provocada por la sierra de Bernia. El Consorcio dispone de cuatro estaciones meteorológicas: Tárbena, Guadalest, Algar y Amadorio. Las tres primeras pertenecen a zonas de mayor pluviometría con una media aproximada de 600 l/m2 y Amadorio al otro espacio con una media anual en torno a 275 l/m2.
¿Cómo han quedado los desembalses por caudales ecológicos de los ríos Guadalest y Amadorio?
El Consorcio de Aguas siempre se ha opuesto a los caudales ecológicos, todo esto se debe a una exigencia de la CHJ al no entender que los ríos Guadalest y Amadorio son Ríos Rambla, que como ya ha dicho Don Antonio Gil Olcina, esta denominación tiene más de mil años de antigüedad, y se trata de una característica común en los ríos mediterráneos de la fachada oriental, que se caracteriza por fuertes avenidas y una fortísima irregularidad, así es, porque prácticamente el río Guadalest y el río Amadorio en verano se quedan normalmente secos. Los usuarios de riego, también se oponen a este caudal porque supone detraer concesiones y nadie les ha comunicado nada. En la actualidad figuran en el PHN y se deben cumplir, incluso en esta última etapa de sequía, han estado vigentes, no obstante se mantienen reuniones con la CHJ para que en el próximo PHN se corrija el criterio actual por el cual se impusieron. También sería solución el proyecto pendiente y recogido por el PHN de llevar las aguas depuradas de Benidorm a los ríos de Amadorio y Guadalest que a su vez servirían de caudales ecológicos.
¿Por qué los regantes se han quejado de la calidad de las aguas depuradas en esta última sequía?
En cuanto al caudal de salida del Terciario de Benidorm, creo que no hay quejas, es un sistema pionero realizado por la Conselleria y ha permitido eliminar los problemas de calidad y salinidad principalmente entre los Regantes del Canal Bajo del Algar que son sus usuarios y su reclamación es por las puntas de salinidad en el agua de entrada a la EDAR. Pero sí que ha habido quejas en el Terciario de Villajoyosa, porque no se ha puesto en marcha este verano, a pesar que los regantes lo han reclamado con insistencia y el costo es mínimo y también por parte de los Regantes de Altea que reclaman la ejecución de un Terciario en la EDAR de Altea. Desde el Consorcio siempre hemos defendido que los regantes deben de tener la máxima calidad de las aguas y desde el punto de vista turístico de esta Comarca es fundamental disponer de un vertido de máxima calidad y que éste sea asumido como un coste más de depuración a través del Canon de Saneamiento.
Por último ¿que nos queda por mejorar en el sistema Marina Baja?
Lo que queda es seguir renovando y por tanto mejorando las infraestructuras existentes y llevar a cabo nuevas infraestructuras que permitan un mayor aprovechamiento de los recursos, entre ellas destacar la necesidad de aumento de la capacidad de almacenamiento ya sea en los embalses existentes (mediante obras o revisando las Normas de resguardos máximos de estos embalses) o en nuevas balsas que permitan aprovechar estos episodios de pluviometría y además es fundamental seguir mejorando la calidad de las aguas regeneras de las tres EDARs de la Comarca.
