Pinchar la «burbuja política», erradicar los enchufes en las empresas públicas, acabar con las duplicades en las administraciones, eliminar las estructuras «que sobran», que el Senado pase a mejor vida... y suprimir las diputaciones. El candidato de Ciudadanos (C's) a la Presidencia del Gobierno, Albert Rivera, plasmó ayer en Alicante algunas de las iniciativas que pretende poner en marcha si llega a La Moncloa tras el 20-D. Entre ellas destacó una por encima del resto: que las instituciones provinciales desaparezcan. Rivera lanzó esta propuesta bajo la atenta mirada de Fernando Sepulcre, el único diputado provincial del partido en la avenida de la Estación y socio «honorífico» del PP. O, dicho de otra forma, el artífice de que los populares hayan conseguido retener el poder en la Diputación, convertida ya en su único gran bastión en la Comunidad, junto a la corporación provincial de Castellón.

Nada dijo Rivera de los sueldos que se han asignado los diputados de Alicante, con 19 dirigentes ingresando más que Ximo Puig, ni tampoco de las jugosas dietas que perciben los integrantes de la corporación por asistir a las reuniones de los organismos autónomos. Siempre habló en clave nacional ante las cerca de 1.000 personas que abarrotaron el salón de actos del Colegio de Médicos. «Queremos pinchar la burbuja política porque aunque se han hecho reformas, no han sido las necesarias», sentenció.

El líder de Ciudadanos cifró todos esos ahorros en 5.000 millones anuales y adelantó que ese dinero se destinará de manera íntegra a cubrir los servicios sociales. «Vamos a suprimir la grasa... y eso al PP y al PSOE no les gusta un pelo», insistió.

Otro de los asuntos en los que se detuvo el candidato de C's fue, cómo no, en la financiación autonómica. Es decir, en el único tema que ha logrado unir a los principales partidos de la Comunidad. Rivera, que no mentó en ningún momento el expolio que han sufrido las arcas valencianas durante décadas, dio a conocer cuál es su propuesta para repartir los fondos del Estado: «Queremos un modelo que garantice por igual la Educación y la Sanidad de las comunidades. Después ya serán las autonomías las que decidirán, con el resto del dinero, si quieren una televisión pública, infraestructuras...». Su modelo tendría «un corte federal» y esquivaría el debate «identitario» entre regiones.

Aunque su intervención se cimentó en clave nacional, Rivera también realizó varias menciones a la Comunidad. Y atizó tanto al anterior Consell del PP como al actual de PSPV y Compromís. A los populares les acusó de «saquear» las arcas públicas, de haber construido un «aeropuerto sin aviones» y de haber llevado a la Comunidad a ser «etiquetada» por sus escándalos de corrupción y el «rescate» del FLA.

Del actual Gobierno valenciano, por su lado, lamentó que el PSPV se plegara ante los «separatistas» de Compromís. «La mayoría de los valencianos quieren estar dentro de España», proclamó, para acto seguido criticar el modelo de inmersión lingüistica del valenciano en las escuelas. «La gente no quiere inventos identitarios ni proyectos educativos que sirvan para eso», apostilló.

Más allá de las críticas, Rivera también puso sobre la mesa algunos proyectos que beneficiarán a la Comunidad, en general, y a la provincia de Alicante, en particular. Uno de ellos, el impulso del Corredor Mediterráneo. «Es fundamental para la industria y para crear puestos de trabajo», dijo. Minutos antes, la cabeza de lista de C's al Congreso por Alicante, Marta Martín, complementó esa medida con otra que redundará en beneficio de las comarcas alicantinas: reducir el IVA turístico hasta el 7%.

Pacto por la Educación

Rivera, sin papeles en la mano y gesticulando en cada frase que pronunciaba, focalizó también su discurso en las dos grandes áreas sociales: la Sanidad y la Educación. De la primera lamentó los recortes, aunque elogió su calidad; mientras que de la segunda censuró los elevados índices de fracaso escolar. Para combatirlos, se comprometió a promover un Pacto Nacional por la Educación al que pretende sumar al resto de fuerzas.

Por último, el también presidente de C's cerró su intervención tal y como la abrió: rindiendo un tributo al policía español fallecido ayer en el ataque de Kabul. «El terrorismo no se soluciona solo con condenas, sino con acciones coordinadas», zanjó.