La receta del expresidente del Gobierno y del PP Mariano Rajoy contra los "parlanchines que circulan por ahí" es la "moderación". El máximo responsable del Partido Popular hasta julio de 2018 ha participado este mediodía en una comida-mitin con unos 600 simpatizantes en La Nucía, donde ha compartido discursos y menú con la candidata del PP a la Generalitat, Isabel Bonig, el cabeza de cartel al Congreso por Alicante, César Sánchez, el número uno a las Cortes por Alicante, José Ciscar, y el alcalde anfitrión, el también popular Bernabé Cano.

En estos días inciertos sobre el resultado de las elecciones generales del próximo domingo, Rajoy ha sostenido que "gobernar es más que un titular, una imagen o una frase supuestamente ingeniosa", por lo que desearían ver actuar a políticos que ha calificado de aficionados en una situación similar a la vivida por los populares con la crisis de 2011. Según el expresidente de Gobierno, "es difícil, complejo, hay que ponderar muchos factores y tener muy claro las consecuencias de las decisiones", ha dicho antes de agregar que el PP sabe hacerlo porque es "un partido con solera, con poso y con gente preparada para continuar haciendo servicios al país".

Para Rajoy, las del 28 de abril "son las elecciones más abiertas en años" a solo 5 días de que se abran las urnas, y ha asegurado que "hoy nada está decidido". Por este motivo, ha advertido asegurando que "cuidado con hacer caso de lo que se dice por ahí" porque en las citas de 2015 y 2016 (cuando se repitieron) "todos los agoreros decían que habría un cuádruple empate" y, ha presumido, al final el PP sacó 50 escaños más que el PSOE, 100 más que Ciudadanos y "otros, que también existían, se quedaron en cero".

Según Rajoy, "del PSOE ya sabemos lo que hicieron porque trajeron la peor crisis" de la historia del país, ha subrayado, "y conviene recordarlo para evitarlo y no reproducirlo en el futuro" ya que hay que tener "mucho cuidado con la situación de la economía española: cuidado de volver a las andadas". Ha enfatizado que, frente a otras opciones políticas, el PP está formado por gente "moderada" y que no es un partido "bisagrista" sino que aspira a gobernar, y ha pedido el voto para Pablo Casado, "un hombre joven, ya curtido, con ambición y que tiene ganas y está al frente de una gran fuerza".

Más reformas y menos estridencias

El expresidente ha recalcado que hay que seguir controlando el gasto público y ahondando en las reformas económicas impulsadas por el PP "porque funcionaron y nos sacaron de la crisis". "Hay que continuar con reformas económicas para no ir atrás", ha insistido Rajoy, dado que "lo que hoy es incertidumbre económica se puede convertir en algo que no queremos".

Ha defendido que el PP mejora España "sin elevar la voz y sin estridencias" y ha indicado que "la política es trabajar y no pronunciar un discurso o una idea brillante", y ha continuado que su partido es "el de los momentos difíciles" como ya demostró en 1996, cuando hizo que se entrara en el euro, y en 2011, al evitar el rescate.

De la candidata a la Generalitat, Isabel Bonig, ha sostenido que es "la mejor candidata" porque se trata de una política "solvente y segura", además de tener experiencia en la administración local y en la Generalitat como consellera. En el discurso anterior, Bonig ha agradecido a Rajoy que, en su momento, se enfrentara a dos crisis "importantísimas" como son la económica, donde tomó "decisiones difíciles y complicadas", y la institucional, cuando aplicó el artículo 155 en Cataluña, y también le ha valorado que mantuviera el partido "unido".