El 26 de diciembre es el día del Cabildo en Sax, un concejo que en la villa ha perdurado con el paso de los siglos trasformando su naturaleza municipal a lo puramente festero. A primera hora de la tarde, como manda la costumbre, el pueblo se congregó en la plaza de la ermita de San Blas para, en asamblea abierta y con el único requerimiento del respeto debido, hablar, proponer, criticar, cuestionar y debatir de todo cuanto tiene que ver con las tradicionales Fiestas de Moros y Cristianos.

Una vez que la Mayordomía dio a conocer las cuentas de 2007, el presupuesto de 2008 y se confirmaron los nuevos capitanes y las bandas de música comenzó el punto más candente: los ruegos y preguntas. El debate sobre el futuro de las Damas y Reinas de Fiestas mayores e infantiles así como la ampliación de la ermita de San Blas centraron la atención de los festeros en una tarde que se tornó fría con la puesta del sol. La Mayordomía también informó de dos ligeros cambios que se introducen este año. El día 2 de febrero las procesiones de la Virgen de la Candelaria y la Bajada del Santo se acortan por la primera calle de la fuente del Vilaje para que los disparos de arcabucería causen las menores molestias a los enfermos. Asimismo, se ha decidido reducir la distancia entre las comparsas en la procesión de la Subida del Santo. También la mesa del Cabildo dio a conocer su postura contraria a las propuestas del anterior concejo y asumió las nuevas para un estudio pormenorizado. Hacía tiempo que la designación del alcalde de Fiestas no generaba tanto interés. La presidencia tuvo que reunirse dentro de la ermita unos minutos para decidir entre los tres candidatos. Finalmente repite Francisco Herrero que contará con la ayuda de José Martínez.