La próxima semana llegan a la provincia las últimas tormentas de la primavera con lluvias e incluso granizo

La próxima semana llegan a Alicante las que pueden ser las últimas tormentas de la primavera. Y aunque las precipitaciones pueden ser localmente fuertes e ir acompañadas de granizo, todo apunta que no dejarán lluvias abundantes que palíen la extrema sequía por la que pasa la provincia. Un temporal que llegará después de un fin de semana con temperaturas que pueden superar los 25 grados, sobre todo en el interior. El cambio llegará en un principio el miércoles, cuando tras rondar los 30 grados el martes, habrá una nueva situación de tormentas. Y después todo apunta que nos encaminamos hacia un junio caluroso.

El director del Laboratorio de Climatología de la UA, Jorge Olcina, ha explicado que "la semana que viene está prevista una nueva situación de tormentas. Seguramente ya la última de la primavera. Se trata de lluvias que caerán en forma de tormenta, con lo cual para el campo pueden resultar incluyo dañinas por la intensidad y la posibilidad de que vengan acompañadas de granizo".

El catedrático de Análisis Geográfico Regional ha anunciado que "después de un fin de semana y primeros días de la semana próxima que va a resultar cálidos, el miércoles y jueves volverá la inestabilidad y la posibilidad de lluvias y tormentas en la provincia, debido a la instalación de una vaguada de aire frío en la península Ibérica. No es una situación de gran inestabilidad, pero en esta época del año cuando ya se acumula calor en la atmósfera, este tipo de situaciones ocasionan la formación de tormentas que pueden venir acompañadas de granizo". Eso sí, las temperaturas máximas previstas, según Aemet, serán altas para esos días pese a las tormentas, entre los 23 y 28 grados, sobre todo en el interior.

Estas tormentas vendrá como consecuencia de una situación procedente del Atlántico, "por tanto no hay que esperar grandes lluvias, aunque sí pueden ser localmente intensas y con granizo. Sería entre el miércoles y el viernes". De cualquier forma Olcina ha aclarado que "no van a ser lluvias abundantes, ni mucho menos. Pero sí localmente en forma de tormenta de poca duración".

Agravamiento de la sequía

Así, Olcina ha recordado que "estamos ante uno de los años hidrológicos más secos de las últimas décadas. Y eso está provocando el agravamiento progresivo de las condiciones de sequía en toda la provincia. La sequía de nuestro país ha pasado de ser una sequía del centro peninsular, una sequía ibérica, a ser en estos momentos una sequía mediterránea. El foco de preocupación de la sequía se ha desplazado, por tanto, a las regiones del Mediterráneo. Por tanto, a partir de ahora tenemos que hacer un uso muy prudente del agua en toda la provincia. Ya han comenzado a manifestarse problemas de abastecimiento en pequeñas poblaciones del interior de la provincia. Y la Marina Alta está en una situación delicada".

Y ha agregado que "de momento los abastecimientos de agua urbanos para el verano están garantizados. Pero si no llueve con abundancia en el próximo otoño habrá que adoptar medidas más severas de control del gasto. Porque el verano como sabemos no es una estación proclive para grandes lluvias, salvo tormentas dispersas, en el área mediterránea. Por lo que la situación de sequía se va a ir agravando con los próximos meses en nuestro territorio.

Hay que recordar que el mes de mayo está agudizando la sequía en la provincia tras ocho meses sin temporales de levante. Los modelos meteorológicos estacionales apuntan a que va a ser otro mes de escasas precipitaciones, al margen de tormentas como las previstas para la semana que viene, que no se espera dejen grandes registros. Y es que situaciones de lluvias intensas por la humedad arrastrada del mar a la costa no se producen desde el pasado mes de octubre, que son realmente las que dejan precipitaciones abundantes en la provincia, ya que los frentes atlánticos, cuando llegan a Alicante, ya están muy desgastados.