Tras siete días de trabajo, los arqueólogos han comenzado en Monóvar el tercer y el cuarto sondeo de la fosa común localizada en el camposanto en busca del lugar exacto en el que fueron inhumados 26 cadáveres de represaliados franquistas al final de la Guerra Civil. Los trabajos de excavación de la fosa del cementerio monovero siguen ahora con el tercer sondeo, en busca de la localización exacta de los cuerpos de estas víctimas del franquismo. Después de no localizar ningún tipo de resto humano en la primera ni en la segunda cata realizadas hasta el momento, el equipo de arqueólogos encargados de los trabajos se encuentra inmerso en el tercer y cuarto sondeo y, según los propios arqueólogos encargados de dirigir la exhumación, con perspectivas de un quinto.
Jorge García, uno de los responsables del equipo de trabajo que desde el pasado lunes, día 10 viene trabajando en la fosa monovera, revela que «tras no encontrar nada en los dos primeros sondeos, hemos iniciado un tercero y un cuarto. En el tercero nos hemos encontrado entre 6 y 8 ataúdes, con cuerpos de niños, que no tienen nada que ver con el objetivo marcado, y debajo han aparecido restos de un adulto, pero que todavía no se le puede relacionar con uno de los 26 represaliados».
«Seguimos trabajando de forma cuidadosa en ese tercer sondeo», manifiesta García, «y al mismo tiempo, con el pico y la pala, hemos iniciado el trabajo en el cuarto sondeo», indica el arqueólogo al frente de la iniciativa impulsada por la Conselleria de Participación, Transparencia, Cooperación y Calidad Democrática.
La localización exacta de la fosa es el primer objetivo que se han planteado los arqueólogos y, ante la falta de documentación que identifique dicho lugar, es lo que está llevándolos a la realización de más sondeos, todos ellos alrededor de la zona donde se presume que está la fosa atendiendo a los testimonios históricos que han perdurado gracias a la insistencia de los familiares de los ejecutados, que no cesan en su lucha de que les devuelvan los restos de sus familiares.
Mientras se trabaja en las catas 3 y 4, Jorge García explica que, en este histórico proceso de exhumación, «ya estamos pensando en iniciar un quinto sondeo siempre y cuando los restos continúen sin aparecer».
Los trabajos de excavación continúan realizándose sin demora. El equipo acude al cementerio todos los días de la semana con la esperanza de hallar los restos de los 26 represaliados, vecinos de las localidades de Elda, Petrer, Sax, Salinas y Pinoso, fusilados bajo la autoridad del dictador Francisco Franco.
Se trata de la mayor fosa de represaliados de la comarca, dado que la plaza de toros de Monóvar sirvió de lugar de apresamiento en la Guerra Civil, al ser Partido Judicial de la zona. Allí se realizaron estos fusilamientos, todos al final de la contienda civil. El alcalde de Monóvar, Alejandro García, habló, el día que se iniciaron los trabajos, de hacer «justicia histórica» con las víctimas y sus descendientes.
