El Acalde de Pinoso, Lázaro Azorín, se mostraba en la tarde de hoy triste y abatido, tras muchas horas pendientes del incendio de la Rambla de Purgateros, y pedía públicamente que "la gente se abstenga de acercarse a la zona, ya que el incendio está controlado, pero no extinguido". Esta noche continuaran los trabajos de control y vigilancia a cargo de las brigadas forestales terrestres y de los voluntarios medioambientales.

El primer edil de Pinoso manifestó a INFORMACIÓN que "la dificultad de acceso a la zona del incendio y la hora de inicio, impidió actuar a los medios terrestres y los aéreos no han podido actuar hasta esta mañana tras la salida del Sol, consiguiendo controlarlo a las 11 de la mañana".

Azorín confirmo que "la superficie quemada ha sido algo más de 3 hectáreas de una zona con un alto valor ecológico, como es el Monte Coto, que Pinoso, al igual que Monóvar, cuidamos con mucho esmero por ser una joya del interior del interior de la provincia que actúa como un balón de oxigeno para todos los habitantes de la comarca".

"Este verano está siendo muy prolífico en incendios en la zona, a pesar de haber tenido un año muy lluvioso -ha señalado Azorín- un gran trabajo de los voluntarios medioambientales y unos planes de prevención de riesgos, que Monóvar y Pinoso, con sus ediles Lorenzo y Silvia, han sabido coordinar. A pesar de todo, de una forma que ya viene siendo cíclica, surgen este tipo de incendios, que presentan unas determinadas características y esto me enfada".

"El origen del incendio, según Azorín, se está investigando, aunque presuntamente, aunque no hay pruebas ni datos por el momento, podría ser intencionado, por la semblanza con otros incendios y las características. Todo ello me lleva a estar muy enfadado".

El alcalde pinosero se mostro muy agradecido por el trabajo de los bomberos del Parque Comarcal de Elda, con Amancio Guerrero al frente; a todos los voluntarios, entre ellos los de la Agrupación de Salinas; a todos los que me han llamado apoyando a Pinoso y sus gentes; a Alejandro y Lorenzo; y a mucha gente de la provincia y de otras partes de España.

Por último Lázaro Azorín quiso recordar "la importancia de tener los bancales limpios de hierbas y las cunetas, causantes a veces de una rápida propagación del fuego y, sobre todo, pensar que aún queda mucho verano por delante y el peligro de incendios está ahí".