El CEIP Azorín de Monóvar lleva semanas remodelando su patio. Hoy, las obras ya han finalizado y, según han informado a este diario, "por fin está en el centro la tan esperada cúpula geodésica".

Se trata de un espacio sostenible, de madera en este caso, de fácil construcción que, partiendo de la figura geométrica más sencilla y resistente que existe, como es el triángulo, se consigue una de las estructuras más fuertes que se conocen. "Una preciosa cúpula construida por los carpinteros que servirá de refugio para el alumnado del centro monovero".

Asimismo, el nuevo patio cuenta ahora con nuevos y diferentes espacios con diversos materiales y texturas como es la arena, la grava, troncos, cortezas, piedras, maderas, plantas autóctonas todo integrado en el huerto preexistente, después de retirar la antigua alambrada que lo separaba.

Y es que, después de muchos años, a finales de enero comenzaron unas esperadas reformas para convertir el patio del centro escolar "en un lugar donde los niños y niñas puedan disfrutar de nuevos espacios de juego y de aprendizaje muy diversos", según aseguran desde la dirección del colegio a este diario.

Con estas obras se pretende que "el alumnado se apropie de los diferentes rincones que se han creado alrededor de las aulas para que puedan divertirse en un entorno más cohabitable y democrático".

Un proyecto que apuesta por "un patio más vivo y coeducativo". Así, el exterior de las clases se convierte también en "un espacio docente".

En definitiva, éste es "un proyecto soñado tanto por los alumnos como por el resto de la comunidad educativa que ya comienza a ver la luz".