La baja de uno de los dos pediatras del centro de salud de Monóvar está retrasando las revisiones del niño sano que se deben realizar entre los 2 y 4 años de edad. El problema se viene produciendo desde hace tres meses y afecta a la mitad de los pequeños de la población comprendidos en esa franja de años. Es el cupo de pacientes asignado al especialista que se encuentra de baja laboral, lo que genera un agravio comparativo entre quienes sí están siendo atendidos en la consulta del otro pediatra.

La situación ha generado quejas entre las madres y padres, que también han denunciado -a través de este diario- que para que sus hijos puedan recibir atención médica deben acudir necesariamente a urgencias.

Desde la Gerencia del Departamento de Salud de Elda se ha anunciado que, en los próximos días, un pediatra de otro centro de salud se desplazará a Monóvar para realizar las revisiones del niño sano que estén pendientes. En cualquier caso se ha querido puntualizar que son controles que el personal de Enfermería puede llevar a cabo perfectamente. De hecho, en otras poblaciones de la comarca se viene haciendo así. Solo en el caso de que las enfermeras detecten algún problema de salud es cuando derivan al paciente al especialista. Sin embargo, en Monóvar este tipo de revisiones siempre las han realizado los pediatras. Con el paso del tiempo se ha convertido en una costumbre que la dirección sanitaria del Alto y Medio Vinalopó no tiene intención de modificar. Lo que sí se niega desde Sanidad es que la atención pediátrica en Monóvar esté sufriendo colapso o demoras. «Las consultas normales de todos los niños y niñas de la localidad las está atendiendo el especialista que sigue en activo», ha asegurado la gerente del Departamento de Salud de Elda, Vicenta Tortosa, detallando las gestiones llevadas a cabo durante las últimas semanas para contratar un nuevo pediatra y enviarlo a Monóvar. «Seguimos a la espera de que el médico se reincorpore a su puesto pero, ante la posibilidad de que la baja se alargue en el tiempo, ya tenemos un sustituto», ha explicado la gerente.

El problema de la falta de pediatras en el Alto y Medio Vinalopó no es nuevo. Este diario ya informó durante el pasado mes de noviembre de que una vacante y tres bajas en los centros de salud había disparado las protestas de los usuarios. Especialmente de las madres y padres que acudían a consulta con sus hijos menores y tenían que regresar a casa con cita para otro día o, en el mejor de los casos, ser atendidos en otros municipios, acudir a urgencias hospitalarias o dirigirse al punto de atención continuada para ser explorados por médicos de familia.

La cuestión es que no hay pediatras en el Departamento de Salud de Elda y a corto plazo es muy difícil solucionarlo. Además, la carencia tiene visos de agravarse porque en el área de Atención Primaria de la comarca seis pediatras actualmente en activo se jubilarán en el plazo de cuatro años. El problema radica en el desajuste entre las necesidades reales de la población y las plazas que el Ministerio de Sanidad oferta en Pediatría a través de los MIR, los médicos internos residentes. Una decisión que depende por entero del Gobierno central y sobre la que el Gobierno valenciano ya ha elevado la correspondiente solicitud.