El Ayuntamiento de Elda acaba de adjudicar el mantenimiento de la señalización horizontal y vertical de la ciudad tras más de diez años sin renovarse. Esta medida pretende acabar con el lamentable aspecto que vienen presentando las señales y pone fin a la confusión que generan entre conductores y peatones. El contrato, de dos años de duración, consigna un importe anual de 74.420 euros con el IVA incluido y permitirá renovar todas las señales del término municipal que sean competencia del Ayuntamiento, así como el repintado de pasos de peatones, bordillos y pavimento.
La empresa adjudicataria es Aceinsa Levante y en la señalización horizontal incluye cualquier tipo de pintado de líneas, bandas, palabras y símbolos sobre la calzada, bordillos o elementos viales destinados a regular el tráfico de vehículos y peatones. Una tarea que también incluye las operaciones de preparación de la superficie a aplicar, el premarcaje y el pintado de marcas. Según se ha indicado desde el gobierno local, se atenderá prioritariamente el repintado y mantenimiento de las vías rápidas y de muy densa circulación. Una vez acometida esta tarea, se actuará, seguidamente, sobre las calles que designe la dirección facultativa.
En lo que a las señales verticales se refiere, los servicios a prestar al Ayuntamiento serán los de instalación o reposición en virtud de los planes y necesidades que establezcan los técnicos. La empresa contratada también deberá suministrar al municipio las señales verticales del modelo, tipo y simbología que se le indique, tanto a petición de la dirección facultativa como de la Policía Local.
El concejal de Seguridad Ciudadana y Tráfico, Enrique Quílez, ha explicado que el objetivo es renovar toda la señalización de la ciudad por el mal estado que presenta. «Pero en primer lugar se actuará sobre los puntos negros del tráfico rodado y en la reserva de espacio para el estacionamiento de los vehículos de los discapacitados», ha puntualizado.
Este asunto ha sido objeto de numerosas quejas vecinales en los últimos años y, de hecho, este diario ya se hizo eco en abril de 2018, y durante el pasado mes de octubre, del estado oxidado, descolorido y cuarteado que presentan buena parte de las señales del casco urbano.
Antecedentes
El Ayuntamiento estaba dispuesto a invertir 247.933,86 euros en esta actuación. Si embargo, la contratación de una empresa que se encargase de la mejora de la imagen de las señales indicativas de la ciudad se encontraba sumida en el lento procedimiento previo a la firma del contrato. Y ello, a pesar de que el expediente de licitación se publicó en mayo pasado en el perfil del contratante, abriéndose las ofertas días después. Sin embargo faltaba un informe que llegó semanas atrás.
Tres de las empresas que han concursado presentaron presupuestos de baja cuantía. Así que los técnicos municipales debían determinar si constituían una baja temeraria o no; un nuevo trámite que hizo que el contrato quedase estancado otros cuatro meses. Y mientras tanto las señales seguían deteriorándose y confundiendo a los conductores y peatones que llegaban a Elda procedentes de otros municipios. Dirigirse, por ejemplo, al Museo del Calzado siguiendo las señales del casco urbano era casi imposible y ocurre lo mismo con otras direcciones.
