Los alcaldes de los municipios de la Mancomunidad de la Vid y el Mármol -Pinoso, Algueña, la Romana y Hondón de los Frailes- han firmado el contrato de gestión que permitirá utilizar la residencia geriátrica 17 años después de su construcción en Pinoso. El concierto suscrito con la Generalitat Valenciana comprende 80 plazas de residentes con una aportación de 883.200 euros y el compromiso de mantener una dotación anual de más de un millón de euros destinado a plazas concertadas.
La licitación del geriátrico comenzó este mismo año, pero la impugnación de una de las empresas presentadas al concurso ha retrasado la firma del contrato con l'Onada, compañía a la que la Mancomunidad le concedió inicialmente la gestión tras unas valoraciones técnicas que, finalmente, también han sido respaldadas por el Tribunal Administrativo de Recursos Contractuales.
«Es un proyecto que lleva muchos años superando dificultades técnicas y administrativas, y cuando pensábamos que ya estaba todo bien aparecía una nueva normativa que retrasaba la apertura» declaraba ayer la popular Mari Carmen Jover, alcaldesa de Algueña y presidenta de la Mancomunidad. Para el primer edil de Pinoso, el socialista Lázaro Azorín, «es un día histórico porque, después de tantos años, por fin nuestros mayores van a estar atendidos y en perfectas condiciones». Desde que comenzara su andadura como alcalde, la residencia ha sido uno de sus grandes retos, y así lo ha expresado durante la firma en Algueña con Cinta Pascual, presidenta y directora general de l'Onada.
El geriátrico comenzó a construirse en 2002 y un año después se licitó la gestión. Pero el concurso quedó desierto y varios problemas paralizaron la obra hasta que pudo completarse en 2007 con un coste de 3,3 millones. Tras años sin uso, el gobierno de Azorín consiguió en 2015 ocupar parte de las dependencias para ubicar a las asociaciones sociosanitarias y en 2017 se logró la cesión de la parcela.
El contrato firmado por la Mancomunidad y l'Onada establece un plazo de explotación de 15 años, incluidos cinco de prórroga y un valor estimado de 25 millones de euros. La adjudicataria tratará de que el 75% de la plantilla esté formada por personas de los cuatro municipios. Ahora queda el trabajo de acondicionamiento y equipamiento del edificio. Un proceso, junto al de la selección del personal, que podría dilatarse seis meses. A partir de entonces el geriátrico estará en disposición de iniciar su actividad incorporando también un centro de día.
