Diez años después de la primera petición formulada por el Centro de Estudios Locales de Petrer, la Generalitat Valenciana ha otorgado protección legal a El Poblet, la finca que en febrero de 1939 se convirtió en la sede de la Presidencia del Gobierno de la II República Española. Fue la residencia del presidente Juan Negrín durante los dos meses previos al final de la Guerra Civil y en ella se celebraron, entre el 28 de febrero y el 6 de marzo de 1939, los dos últimos Consejos de Ministros.

El pleno del Consell aprobó ayer el decreto por el que se declara Bien de Interés Cultural (BIC), con categoría de lugar histórico. La tramitación del expediente se inició por resolución de incoación de 19 de febrero de 2019, de la Conselleria de Educación, y no ha recibido ninguna alegación.

Al conocer la noticia, la alcaldesa de Petrer, la socialista Irene Navarro, ha expresado que «este es un hito muy importante para la localidad, no solo en cuanto a reconocimiento y puesta en valor de nuestro patrimonio, sino también a nivel turístico, ya que va a suponer un referente y atractivo más para muchas personas que decidan visitarnos». Por su parte, el concejal de Cultura y Patrimonio, Fernando Portillo, ha querido mostrar su agradecimiento al esfuerzo y trabajo de los integrantes del Centro de Estudios Locales de Petrer, como iniciadores de la tramitación, y en particular al historiador local Boni Navarro, «que es quien más ha peleado e investigado y divulgado este suceso histórico», en palabras del concejal.

Constituye uno de los lugares más interesantes de la provincia de Alicante relacionados con la Guerra Civil, al ser, en febrero del año 1939, la última sede del Gobierno de la II República Española. Esta relevancia histórica se reconoce ahora mediante la declaración como BIC. Los orígenes de la finca, ubicada a dos kilómetros del casco urbano de Petrer, se remontan a principios del siglo XIX. Confiscada durante los años de la Guerra Civil, se utilizó como colonia infantil para niños refugiados, hospital militar y, posteriormente, centro de control aéreo. Por este uso militar adquirió el nombre de «Posición Yuste».

La amplia finca es privada, se halla junto a la autovía de Madrid y cuenta con casa principal, pabellón y una tercera edificación más antigua además de jardín con estanques, invernadero y glorieta.