Efectivos de la Policía Local y Guardia Civil de Novelda tuvieron que emplearse a fondo para reducir a un hombre muy agresivo, que provocó una alteración grave de la seguridad ciudadana. Los hechos se produjeron a las nueve de la noche en la calle . El arrestado, que al parecer se encontraba bajo los efectos de alguna droga, increpó a los clientes de uno de los bares que hay situados en la calle Capellán Margall. Varias llamadas telefónicas alertaron a la Policía Local de lo que estaba sucediendo. Cuando una patrulla llegó al lugar, el presunto autor recibió a los agentes a gritos con insultos y amenazas de muerte.

Al tratarse de un hombre alterado y corpulento, que mostraba una actitud muy agresiva, se solicitaron refuerzos y acudieron cuatro patrullas. Tres de la Policía Local y una de la Guardia Civil. Tras golpear supuestamente a varios agentes, finalmente consiguieron reducirlo y esposarlo mientras su pareja trataba de tranquilizarlo. Tres agentes sufrieron heridas leves pero uno tuvo que ser trasladado desde el centro de salud de Novelda al Hospital Universitario de Elda.

El arrestado, que acabó en el calabozo y a disposición judicial el sábado, cuenta con antecedentes penales y, de hecho, ya cumplió tiempo atrás una condena por intento de homicidio.

Estafas en Elda

Por otra parte la Guardia Civil ha detenido en Elda y Novelda a tres hombres de nacionalidad española, de 63, 54 y 45 años, como presuntos autores de un delito de estafa, falsificación de documento privado, amenazas y denuncia falsa. El dinero estafado asciende a 94.000 euros y las investigaciones se iniciaron en julio. Los autores modificaron un cheque bancario de curso legal, sustituyendo el importe a percibir y el nombre de la empresa destinataria, para cobrar de manera fraudulenta 43.000 en un banco de la ciudad. Sin embargo los agentes lograron dar con el presunto autor y lo detuvieron en Elda. Se trata de un hombre de 63 años al que le imputaron los delitos de estafa y falsificación documental. Días después de esa detención, se volvió a dar una circunstancia similar cuando un hombre denunció haber sido víctima de una estafa por un pagaré falso de 51.000 euros.

Según el denunciante, quien le entregó ese pagaré era una persona de origen guineano, pero en las nuevas declaraciones que este hombre prestó ante la Guardia Civil, acabó confesando que había mentido porque actuó bajo las amenazas del verdadero autor. A pesar de que las primeras sospechas recayeron sobre el vecino de Elda, detenido anteriormente, esta vez fue otro hombre, un español de 45 años, el supuesto autor de la estafa, la falsificación de documento y las amenazas. Del mismo modo se averiguó que ambos actuaban, presuntamente, de manera conjunta. Por último un tercer hombre, español de 54 años, fue arrestado e imputado como presunto autor de un delito de denuncia falsa. Los tres ya están en libertad con cargos.