La Cabalgata adelantó ayer su horario una hora. Así, la Banda Municipal de Música acompañó a las Regidoras de Villena, María Navarro y Alba Ruiz en el desfile nocturno. Era la primera vez que estos cargos festeros abrían la Cabalgata y desfilaban a pie, tras la decisión de la concejala de Fiestas, Maite Gandía, de eliminar la carroza de las Regidoras y madrinas que clausuraban los dos grandes desfiles.

Tras la banda, poco después de las ocho de la noche, emprendía su camino la comparsa de Cristianos encabezada por el embajador del bando de la cruz, que horas antes había perdido el castillo, y su boato. Hace décadas que los Cristianos no desfilan cuando los rayos de sol todavía iluminan el cielo. Las marchas cristianas se adueñaron del recorrido de la Cabalgata al paso de los Cristianos, Almogávares y Ballesteros. Toda una demostración de fortaleza y poderío de los bandos de la cruz que dejaron bien claro en su desfile que la elegancia no es territorio exclusivo de los moros.

Los Maseros entraron en el desfile con una alegoría como boato que acompañó a los cargos festeros y para sorpresa del público llegaron con una pieza musical inusual en este tipo de festejos: la marcha Radetzky. La composición orquestal de Johann Strauss (padre), escrita en el año 1848 fue la elegida. En la misma comparsa de Maseros, se echó de menos a su grupo alegórico que durante más de 40 años ha participado en el desfile bailando piezas típicas del folclore local. Este grupo se despidió de la comparsa el pasado 15 de agosto, en la asamblea general. Cuando el paso popular de los Maseros desapareció del desfile llegó el garbo y el salero que caracteria a los Contrabandistas.

En las filas de los Marinos Corsarios, una de sus escuadras, la de Marineros de Chicharra cumplía su décimo aniversario y para esta ocasión, optaron por un boato de corte mítico y marinero. Así, en esta efeméride quisieron recordar a los antiguos Telquines, seres mitad marinos y mitad terrestres. La mitología los sitúa como los primeros habitantes de la isla de Rodas y los creadores de la Atlántida. En la Cabalgata, el paso de esta escuadra especial estuvo precedido del ballet Marineros del Chicharra con la coreografía señores del mar.

Al cierre de esta edición hacía su aparición la comparsa de Estudiantes la última del bando cristiano. Tras ella, se esperaba el paso de las siete de moros: Piratas, Bareberes, Nazaríes, Bando Marroquí, Moros Nuevos y Viejos.