Los 36 kilómetros de conducciones de la margen izquierda del postrasvase del Júcar han comenzado a instalarse en el embalse El Toscar de Monóvar para poder llevar el agua a 20.000 hectáreas de cultivos del Vinalopó y l'Alacantí. Esta infraestructura hídrica, que las comunidades de agricultores y regantes de la provincia vienen reclamando desde 2010, es esencial para que los caudales procedentes de la toma del Azud de la Marquesa, en Cullera, lleguen hasta los campos de Agost tratando de frenar, de este modo, la grave y prolongada sobreexplotación que padecen los acuíferos de Villena que abastecen a buena parte de la provincia.

Los primeros movimientos de tierra y apertura de zanjas han comenzado a ejecutarse estos días, a menos de un mes de las elecciones autonómicas, y un mes después de que el director general del Agua de la Generalitat Valenciana, Manuel Aldeguer, se reuniese con los alcaldes de Monóvar, Pinoso, Monforte del Cid, La Romana, Agost, Novelda y Hondón de las Nieves para firmar el acta de replanteo de la obra.

La Conselleria de Agricultura y Medio Ambiente ha destinado 3,1 millones de euros a la empresa pública Tragsa para desarrollar, en diez meses, los 2,5 kilómetros que comprende el Tramo 0 de la primera fase. La tubería partirá del embalse de El Toscar para conectar con las instalaciones que la Sociedad Agraria Percamp del Vinalopó tiene en la carretera CV-833 con dirección Pinoso.

Según ha confirmado el Consell, los proyectos de los Tramos 1 y 2, que abarcan las conexiones de Monóvar, Novelda y Agost, ya están en vías de inminente licitación. El primero está más adelantado y la previsión es que las obras comiencen antes de que finalice 2019 con un montante de 12,9 millones. Mientras tanto los técnicos están ultimando la redacción del Tramo 3, el de la bifurcación de Monforte-Agost, con el que quedará completada la primera fase de la margen izquierda.

Los Tramos 0 y 1 cuentan con un presupuesto próximo a los 16 millones de euros y «con su ejecución queda clara la apuesta de la Generalitat por el mantenimiento e incremento de la economía de las comarcas del Vinalopó». Así lo ha indicado el secretario autonómico de Medio Ambiente y Cambio Climático, Fran Quesada, durante su visita ayer a los trabajos en compañía del propio Manuel Aldeguer y de responsables municipales de Monóvar y Pinoso.

Aumento de caudal

Fran Quesada resaltó ayer la ampliación de los caudales que podrían llegar a la provincia.«De los seis hectómetros cúbicos fijados inicialmente en el trasvase podremos pasar a 30 hectómetros cúbicos cuando acaben las obras en un plazo de dos o tres años. Y eso abaratará el precio del agua, que es uno de los compromisos que la Generalitat y el Gobierno del Botànic tiene con los agricultores y con la zona del Vinalopó y el sur de Alicante», indicó Quesada en clara clave electoral, añadiendo que «esta obra es necesaria para la provincia y también es la principal obra de la Generalitat en materia hídrica en esta legislatura», subraya queriendo aclarar también la postura de la Conselleria de Medio Ambiente respecto a la recuperación de la titularidad del embalse de El Toscar. Esta infraestructura hasta la fecha estaba en manos de la Junta Central de Usuarios del Vinalopó, Alacantí y Consorcio de Aguas de la Marina Baja. «Es preciso dejar claro que esta balsa es de dominio público tal y como ha establecido la abogacía y ha determinado un tribunal. Pero la gestión continuará en manos de la Junta Central de Usuarios», ha dicho tajante.

También el alcalde de Pinoso, el socialista Lázaro Azorín, ha estado supervisando las obras junto a los concejales de Monóvar.

«Siempre se decía que el agua llegaría a nuestra localidad pero cuando llegamos al Ayuntamiento hace ocho años el proyecto del trasvase no lo contemplaba. Así que nos pusimos a trabajar con el director general del Agua y hemos conseguido que los caudales del Júcar lleguen a Pinoso con el Tramo 1». Para el primer edil «el Consell ha cumplido su compromiso para no dejar sin recursos hídricos al municipio con mayor producción de vino de la provincia, máximo productor de vino ecológico de la Comunidad y con una de las cooperativas de frutos secos más importante de España».

Incertidumbre

Sin embargo, de nada servirá la margen izquierda del Júcar ni la inversión consignada por el Consell si el Ministerio de Medio Ambiente no desbloquea, a través de la Confederación Hidrográfica del Júcar, la firma del convenio que debe regular el precio del agua y los metros cúbicos a trasvasar desde Cullera hasta el embalse La Cuesta de Villena. A día de hoy el acuerdo entre el Gobierno y la Junta Central de Usuarios permanece estancado y el borrador elaborado en diciembre de 2015 sigue sin avanzar, lo que mantiene viva la preocupación e incertidumbre entre los agricultores de la provincia, que ya han solicitado un riego de socorro para afrontar la nueva campaña.

Los regantes siguen reclamando un convenio definitivo que contemple un precio asequible para los usuarios. Los 0,39 céntimos por metro cúbico que recoge un informe del Patrimonio del Estado presentado durante los últimos días del Gobierno de Rajoy son inasumibles para unos agricultores que, con un coste superior a los 25 céntimos por metro cúbico, se verían abocados a abandonar sus explotaciones agrícolas por falta de rentabilidad.