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Petrer

Dos adolescentes ingresan siete meses en un centro por un atraco

Asaltaron a la dueña de una panadería con navajas y el rostro oculto para lograr 50 euros - Ambos carecen de antecedentes y proceden de familias estructuradas

Dos de los amigos frente a la tienda situada junto al parque El Campet. ÁXEL ÁLVAREZ

Siete meses de internamiento en un centro de menores y libertad vigilada durante un periodo revisable tras cumplir la pena impuesta. Es la decisión que ha adoptado la Fiscalía de Menores de Alicante después de que dos adolescentes de 14 y 15 años atracaran una pequeña panadería de Petrer. Concretamente un establecimiento situado en la transitada calle Jaime I, junto al parque de El Campet.

El robo con violencia e intimidación se produjo a las cinco de la tarde y los dos asaltantes, que ocultaron sus rostros con un pasamontañas y una capucha, esgrimieron dos navajas de gran tamaño para obligar a la propietaria a entregarles el dinero de la caja registradora. De este modo consiguieron huir con un botín de 50 euros. Pero unas horas después la Policía Nacional de Elda-Petrer ya los había identificado. Al día siguiente se les detuvo en sus casas y, tras ser puestos a disposición de la Fiscalía de Menores, fueron trasladados por separado a dos centros de internamiento.

No proceden de familias desestructuradas ni tenían antecedentes delictivos. Solo uno de ellos había tenido problemas en el instituto de Petrer donde estudia por absentismo y comportamiento inadecuado. Este diario logró contactar en la tarde de ayer con su pandilla -todos menores salvo uno- en el conocido como parque del conejo. «Ha sido un error que ha cometido por culpa de los porros. Tenía que pagarle a un camello y por eso hizo esa locura. Pero es un buen chaval. Nunca se ha metido en problemas», indicaron los amigos advirtiendo, no obstante, que «la condena es muy dura para ser la primera vez que hace algo así. Pensamos que deberían haberle dado una segunda oportunidad antes de meterlo en un reformatorio». El grupo decidió escribirle ayer una carta de apoyo, y se la entregó a su madre para que se la haga llegar cuando lo visite en el centro de menores donde está internado.

Por su parte la víctima del atraco, una mujer de 44 años, ha decidido traspasar el negocio y, de hecho, ya está en manos de otro propietario. Se llevó un buen susto del que sigue recuperándose.

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