Hace un año, la Semana Santa eldense vivía los tiempos más convulsos de sus 30 años de historia. La Junta Mayor era intervenida a pocos meses de la celebración religiosa. Tanto el obispado como los integrantes de las cofradías eligieron a José Santa para salvar la situación, sacar adelante la Semana Santa y ordenar los estatutos y la organización interna de las hermandades.
P El pasado año, la diócesis decidió intervenir la Junta Mayor para cambiar los estatutos que estaban desfasados...
R No fue una imposición como tal. La decisión llegó motivada porque había una convocatoria de elecciones a Junta Mayor y se creyó que no se daban las condiciones para asegurar la armonía. Había un conflicto latente. Así que se valoró parar y proponer a una persona que dirigiera la Junta Mayor, tanto por parte de las cofradías como el obispado. A ello iba unido que había que adaptarse a las normativas vigentes, que hasta entonces no se había hecho.
P La gestora ha sido atípica ¿Es así?
R Una gestora la forman los diferentes presidentes de las cofradías. No ha sido esa la situación. Todo nace en una coyuntura tumultuosa. Los comienzos fueron complicados. Se me nombra comisario pero la gestora no está claro cómo se conforma, pero había que sacar la Semana Santa adelante. A ello se suma que el pasado año por el andamio de Santa Ana se tuvo que tomar decisiones muy radicales. Ahora, con el paso de los meses, el grupo se ha ido cohesionando. Hemos llegado a estar en la mesa más de 20 personas. Y de ahí, de una manera muy natural y muy normalizada está saliendo todo.
P El andamio impedía el transito de los pasos en la iglesia de Santa Ana y hubo cambios ¿Se mantendrán?
R Sacar el Encuentro de la Plaza Castelar va a ser complicado, porque la gente estuvo encantada. Estamos de acuerdo que ese es el emplazamiento, aunque a la cofradía de la Verónica le cuesta un esfuerzo tremendo porque procesionan desde San José. Asimismo, los asistentes a la Carrera Oficial, que se celebró el Viernes Santo, también quedaron muy contentos y planteamos hacer lo mismo. Se estuvo valorando. La decisión final fue volver a Santa Ana porque se le dio más importancia a que la iglesia fuese el lugar común. Por otro lado, se está viendo qué hacer con la calle Nueva y Colón, que quedan al final del recorrido. Son las vías más bonitas que tiene Elda y, sin embargo, las cofradías procesionan casi en solitario.
P ¿Cuándo se celebrarán elecciones para la Junta Mayor?
R Después de la Semana Santa.
P La Semana Santa y el resto de las fiestas locales piden la construcción de una nueva puerta en Santa Ana. A pesar de la negativa del equipo de gobierno¿Siguen reclamándola?
R Sí. No creo que el dinero público se deba gastar en erigir un altar en Santa Ana, pero hay cuestiones que exceden de lo eclesial. El templo, en muchas ocasiones, se convierte en un centro social. En este sentido va el tema de la apertura de esa puerta, que no beneficia tanto a la iglesia como a cuando se convierte en un centro neurálgico de la fiesta. Con el nuevo ayuntamiento deberemos volver a sentarnos, negociar y replantearnos qué representa la iglesia de Santa Ana para la ciudad.
P¿Qué ha descubierto de la Semana Santa eldense?
R Como fiesta tiene una riqueza importante que no la poseen las demás y que son las imágenes. Ves la devoción que las personas tienen a ciertas imagenes, no a la talla en sí, sino a lo que le quiere decir. Es una fuerza tremenda.
