La protección de la finca El Poblet de Petrer por parte de la Generalitat Valenciana culmina tras una década de trámites y llega en el año en el que se conmemora el 80 aniversario del final de la Guerra Civil. Una efeméride para la que se ha preparado un calendario de actividades bajo el epígrafe «Alicante 2019, capital de la memoria» y en cuya presentación el President Ximo Puig anunció la publicación, en el Diario Oficial de la Comunidad Valenciana, de la declaración de Bien de Interés Cultural (BIC) para El Poblet.
El reconocimiento permitirá visitar el histórico enclave donde Juan Negrín instauró la sede del Gobierno de la II República en plena Guerra Civil hasta que, en la madrugada del 6 de marzo de 1939, partió al exilio tras presidir el último consejo de ministros y después de mantener varios encuentros con el general Miaja.
La propiedad pertenece al centenario Eliodoro Gran Beltrán, un abogado alicantino que la heredó de su padre a quien el Estado se la incautó -que no expropió- al concurrir una situación excepcional. Primero se convirtió en colonia escolar para acoger a los niños huérfanos de la guerra y posteriormente fue utilizada como hospital del ejército republicano. Pero al finalizar la contienda volvió a manos de su dueño y desde entonces está cerrada al público y restringida a cualquier visita.
Sin embargo tras la declaración del BIC, y en cumplimiento de la Ley de Patrimonio, El Poblet deberá ser visitable entre dos y cuatro días al mes. Para ello será necesario que la Conselleria suscriba un convenio con la propiedad para definir los días, horarios, condiciones y zonas abiertas.
La protección llega diez años después de que el Centro de Estudios Locales realizase la primera solicitud formal para el inicio de la tramitación. «Pero a partir de este momento, con la incoación del expediente, la finca ya es Bien Cultural aunque se encuentre en exposición pública», ha explicado el concejal de Patrimonio, Fernando Portillo, agradeciendo la «entrega y trabajo» del historiador local Boni Navarro, que «es quien más ha peleado, investigado y divulgado este hito histórico». Palabras refrendadas por los concejales Rafa Masià y Silvia Rodríguez, de EU y Compromís, para quienes «ha valido la pena el esfuerzo para poder poner en valor esta isla de paz que es El Poblet, una isla de paz en una España en guerra».
La finca está muy bien conservada y posee un amplio jardín.
Un mes tiene ahora el dueño para presentar alegaciones al BIC, si bien prescindió de hacerlo cuando la finca fue declarada Bien de Relevancia Local.
Elda, Monóvar y Petrer crean una ruta turística con los vestigios de la Guerra Civil
La actividad vuelve el domingo tras la buena acogida de su primera edición, en la que se completaron todas las plazas
Los concejales de Turismo de Elda, Petrer y Monóvar: Belén Alvarado, David Morcillo y José Alcaraz, han anunciado la próxima ruta de la II República, «Del Vinalopó al exilio», que visita los lugares más emblemáticos de este periodo histórico que une a los tres municipios. «Hicimos la primera actividad el pasado 3 de febrero con un éxito absoluto», ha señalado Alvarado recordando que «se completaron las 30 plazas y los visitantes estuvieron encantados».
Las novedades de la próxima edición, fijada para el domingo 3 de marzo de 9 a 17 horas, incluyen transporte, guía acompañante, guía turístico, desayuno y comida en restaurante, folletos informativos y merchandising por 30 euros, mientras que para los menores de 12 años se reduce a 15 euros
El autobús saldrá desde la Bassa el Moro de Petrer y la primera parada será el refugio antiaéreo de esta localidad. Después se pasará por Elda, donde los visitantes podrán ver la Vara de Mando de Manuel Azaña, la casa donde nació Emilio Castelar y el Casino. A continuación acudirán a la pedanía monovera de El Fondó para visitar el aeródromo desde el que huyeron Juan Negrín, La Pasionaria y Rafael Albertí. Y a partir de ahora, tras el BIC de El Poblet, también se incluirá esta finca en la ruta «Del Vinalopó al exilio».
