P ¿Por qué niega ser un okupa?
R No lo soy. Lo que estoy haciendo en este lugar es protección y no ocupación. Solo quiero ayudar a preservar este espacio cultural.
P ¿Con qué pretensión?
R Es muy triste que una construcción así, con tanta relevancia histórica, se quede en un vago recuerdo de lo que en su época fue.
P ¿Y cuánto tiempo está dispuesto a aguantar?
R Hasta que empiecen las obra de restauración. Entonces si me lo piden me marcharé. Pero también me ofrezco a trabajar en la rehabilitación de edificio sin cobrar nada durante dos años.
P ¿Dos años?
R Sí porque en 2021 tengo intención de embarcarme en otra iniciativa en favor de la infancia a través del Camino de Santiago aprovechando que es año Jacobeo.
P ¿Por qué se lo llevó detenido la Guardia Civil el viernes?
R Para que compareciera ante la jueza porque me quería notificar que tengo pendiente una multa de 900 euros o tres meses de cárcel por una condena de hace dos años. Fue por meterme con el Rey Juan Carlos I a través de Faceebok. La jueza me lo comunicó y acto seguido quedé en libertad.
P ¿De qué vive aquí?
R De lo que pude ahorrar tras mi último trabajo de seis meses en la hostelería y también de la ayuda de mi familia, amigos, donaciones particulares y de muchos residentes de la Colonia que me traen comida, me dejan asearme y cargar la batería del móvil en sus casas.
P ¿Lo han aceptado bien?
R De maravilla. Estoy muy agradecido con casi todos los vecinos de la Colonia y de Sax porque han venido personas buenas y amables que me apoyan. Ellos tampoco desean que este lugar muera.
P Pero el dueño también ha venido y lo ha denunciado...
R Mantuve una conversación muy cordial con él y está de acuerdo en que restaure el teatro. Pero me comentó que su familia no puede hacerlo porque carece de recursos, y que la denuncia que me tenía que poner era por una cuestión de tecnicismo legal.
