El Ayuntamiento de Aspe, a través de las concejalías de Medio Ambiente y Servicios, ha comenzado los trabajos para el control de la procesionaria y del tomicus en las pinadas del término municipal. Tanto en parques y zonas públicas como en los centros educativos y en los parajes del Cantal de Eraes, Los Algezares y Peñón de La Ofra, entre otros. Unas tareas que superan los 12.000 euros de coste con cargo al Consistorio.

Según explica el concejal de Medio Ambiente Iván Escobar, «dada la proliferación de la plaga de procesionaria y ante los pocos recursos ofrecidos por parte de la Conselleria de Medio Ambiente en los últimos años, a pesar de que es competencia suya, hemos tenido que actuar de nuevo porque para el actual equipo de gobierno es un tema sensible mantener en buenas condiciones nuestros parajes naturales, parques y centros escolares. Por ello, hemos tomado la determinación de intervenir con medios municipales para poder frenar las plagas de procesionaria y tomicus que están atacando y mermando nuestras pinadas». Una lucha biológica en la no se usan insecticidas sino vacilus y trampas de feromonas para respetar el medio ambiente.