El dueño de un céntrico hostal familiar de Novelda falleció ayer, sobre las cuatro de la tarde, tras sufrir un desgraciado accidente en el Día de Todos los Santos.
Las fuentes consultadas han indicado que la víctima se encontraba realizando una pequeña reparación en el tejado con sus herramientas cuando la cubierta cedió ante el peso, y se precipitó al vacío tras impactar contra la claraboya. Cayó desde la altura aproximada de un segundo piso al pasaje peatonal interior que conecta las calles Castelar y Argentina.
El fallecido tenía 65 años de edad, estaba casado y tenía dos hijos y tres nietos. Era un hombre muy conocido y apreciado en Novelda. De hecho, la noticia de su lamentable muerte sobrecogió a la población en un día marcado por el recuerdo a los difuntos.
El suceso conmocionó a los comensales de un restaurante cercano y varios de ellos llamaron a Emergencias para pedir ayuda.
Al lugar acudieron tres ambulancias, una de ellas del Samu, tres dotaciones de la Guardia Civil y dos de la Policía Local. Nada pudieron hacer los sanitarios por salvarle la vida. La Guardia Civil abrió una investigación y la Policía Local desvió el tráfico en las calles adyacentes al pasaje, hasta que la comisión judicial ordenó el levantamiento del cadáver.
