El alcalde de Elda, el socialista Rubén Alfaro, mantuvo ayer una reunión en el Ayuntamiento con Francisco José Alonso, presidente de la Liga Pro Derechos Humanos, con el objetivo de continuar poniendo en valor el legado de Manuel Azaña, presidente de la II República entre los años 1936 y 1939, cuya vara de mando ya fue donada por él pudiéndose contemplar en la exposición permanente situada en el vestíbulo del Consistorio eldense.

Durante el cordial encuentro Alonso se comprometió a donar a Elda una pluma estilográfica utilizada en su día por Azaña, así como diversos manuscritos del presidente republicano, con el fin de que también puedan ser expuestos al público y, de este modo, continuar acrecentando el legado histórico, cultural y patrimonial de una ciudad que fue el escenario de los últimos días de la II República antes de que sus dirigentes se marcharan al exilio.

Cabe recordar que la Liga Pro Derechos Humanos ya entregó a Elda, en el año 2007, la vara de mando de Manuel Azaña que luce en el Ayuntamiento desde el pasado 11 de abril, cuando fue inaugurada la exposición permanente que el propio Francisco José Alonso visitó ayer por vez primera.

Precisamente Elda, Petrer y Monóvar fueron las últimas tierras que pisaron los dirigentes de la II República Española, Negrín, Alberti y la Pasionaria, antes de huir desde el aeródromo de la pedanía monovera de El Fondó. Un patrimonio único en el que se han fijado los tres alcaldes, los socialistas Rubén Alfaro, Irene Navarro y Natxo Vidal, como germen para atraer al turismo histórico y cultural. Sobre esta cuestión cabe recordar que el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, visitó la semana pasada tanto El Poblet de Petrer -enclave del último Gobierno republicano- como El Fondó de Monóvar -donde se instaló el cuartel general- y anunció que el próximo año la provincia de Alicante celebrará, con diferentes actos, que 80 años atrás fue la última sede del Gobierno de la II República.