Elda se sitúa en el ranking de los precios de la vivienda de las ciudades de más de 25.000 habitantes como una de las más baratas de España, con costes de (3,8 euros/m2 al mes). Sólo se posicionan por debajo de la ciudad zapatera, Lucena (3,5 euros/m2 al mes) y Almendralejo (3,6 euros/m2 al mes) y en el mismo precio, Valdepeñas (3,8 euros/m2 al mes). Desde el Observatorio de la Vivienda y Suelo se indica que «en el caso de Lucena, Alzira y Elda se puede contrastar con los datos obtenidos a través de los depósitos de fianza en los que se registra una renta media inferior a 3,5 euros/m2 mes».

El precio de Elda está muy por debajo de la media nacional. El actual del alquiler en España ronda a los 8,45 euros por metro cuadrado al mes. En la Comunidad Valenciana se establece en una media de 6,52 ?/m2 al mes.

Por otra parte, en el informe que edita la entidad del Ministerio de Fomento se establece que la superficie media de los pisos que se ofertan en Elda es de 122, 9 metros cuadrados y que la cuantía media en la que se sitúan los arrendamientos alcanzan los 384 euros (según datos de 2016) , aunque en 2017 los precios despuntaron pero de forma muy progresiva. Frente a las subidas en escalada de urbes como Madrid o Barcelona incluso de la costa alicantina, en la capital del calzado de señora el valor de los alquileres sigue muy estable.

La zona más barata es la del barrio de Las 300 y la más cara y las que los clientes prefieren se sitúan en la periferia: Avenida de Ronda y la zona de bungalows y chalés del Club de Campo. No obstante, el centro se mantiene como una de las más apetecible para un sector de mayor edad.

En Elda se dan dos cuestiones casi contradictorias en las normas de los mercados. La oferta es escasa y a pesar de ello, los precios se mantienen bajos, aunque en los últimos años se han incrementado algo más del IPC. Desde el sector inmobiliario local insisten en que en Elda, el parque de vivienda para alquiler era amplio hace escasos años. La demanda se ha disparado, comienza a despegar la oferta, pero todavía no es suficiente.

Los agentes inmobiliarios no creen que a los eldenses les guste más alquilar que comprar pisos. La tendencia de adquirir en propiedad ladrillo no es algo que se haya descartado, simplemente las restricciones de créditos, los sueldos bajos y la inseguridad laboral de los más jóvenes les ha obligado a optar por esta modalidad para salir de casas de su padres o para crear un hogar con sus propias familias. Es la formula para resolver el alojamiento de los expulsados del mercado de compraventa.

Asimismo, los agentes inmobiliarios observan como algunos de los propietarios no están dispuestos a alquiler para conseguir rentas tan bajas. El mercado sigue retenido mientras algunos particulares esperan que los precios se incrementen.

A pesar de esta situación, Elda no sólo lidera el ranking de las ciudades más baratas sino que con datos del Ministerio de Fomento es una de las ciudades de España de más de 25.000 habitantes más baratas a la hora de comprar vivienda.