Las facturas del servicio de limpieza y recogida de residuos sólidos urbanos de Elda fechadas en 2016 y que se pagaron en 2017, le siguen costando caras a la ciudad y dando quebraderos de cabeza al equipo de gobierno. Hace unas semanas llegó al Ayuntamiento la sentencia firme del juzgado de lo Contencioso Administrativo número 2 de Alicante, que le condena a pagar 140.548 euros a la mercantil Fomento Benicasim S.A (FOBESA), en concepto de intereses por abonar los recibos en un plazo superior a los 30 días marcados por la ley.
La empresa concesionaria del servicio de limpieza de la ciudad interpuso una demanda por un importe de 203.315 euros por el retraso de unas facturas correspondientes a los meses de septiembre, octubre y noviembre de 2016, que se abonaron en 2017, una vez iniciado el trámite judicial por parte de la empresa. En aquel entonces se reclamaban el pago de las facturas así como los intereses de demora. El importe de las mensualidades se liquidó pero la empresa continuó reclamando los intereses del retraso.
Al mismo tiempo, el pago de esas facturas por un importe de 1.338.193 euros el pasado año ocasionó que se superase la regla de gasto y por lo tanto se bloquearon las cuentas municipales en más de 3 millones de euros, lo que ha limitado sensiblemente la capacidad de inversión del Ayuntamiento y propiciado un plan económico financiero. Así, además de inutilizar algunas de las partidas presupuestarias, la falta de celeridad a la hora de pagarlas le va a suponer al municipio una importante cantidad de dinero.
La resolución judicial le imputa a la administración municipal un delito de «inactividad».
Por su parte, el grupo de gobierno del Ayuntamiento trató de justificar el retraso en el pago «en una serie de circunstancias relacionadas con la posible prórroga del contrato».
