Como un jarro de agua fría ha caído entre el equipo de gobierno de Los Verdes en Villena el anuncio del nuevo ministro de Fomento, José Luís Ábalos, de la paralización de los trenes de cercanías entre la capital del Alto Vinalopó y Alicante. El diciembre del año pasado el Consejo de Ministro aprobó el listado de servicios ferroviarios declarados como obligaciones de servicio público (OSP), que incluía el incremento de los trenes de cercanías entre Villena y Alicante. De hecho suponía la ampliación en cinco trenes OSP en la línea que conecta la capital del Alto Vinalopó con Alicante. De este modo, de los cinco convoyes que circulan por la línea de cercanías se pasaban a diez por sentido, con un tren cada hora y media.

El alcalde de Villena, Javier Esquembre indicó que el anuncio realizado por Ábalos en la reunión mantenida con el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, sobre la paralización «sine die» de la ampliación del servicio de trenes de cercanías en la comarca «es un jarro de agua fría. Ya que estábamos a la espera de que nos confirmasen los horarios para el mes de septiembre y ahora nos hemos quedado sin frecuencias y sin horarios».

El alcalde de Villena insistió en que los servicios de trenes de cercanías en el Alto y Medio Vinalopó son insuficientes y que se seguirá trabajando para que se desarrolle un completo Plan de Cercanías. Este Plan pasaría por incrementar la línea C2 entre Valencia y la Font de la Figuera y crear una nueva línea que conectaría Villena con la Font de la Figuera y, de este modo, Alicante con València.

El alcalde de Villena, aunque acepta las dificultades de la gestión del Ministerio en materia ferroviaria, insistió en que Fomento no puede poner la excusa que no se ampliará el servicio de trenes de cercanías en la comarca por la falta de un convenio con Renfe, «ya que es necesario que se pongan de acuerdo todos los organismos para el desarrollo futuro de la comarca».