Combatir el clandestinaje del sector del calzado entre los colectivos más vulnerables de aparadoras, rebajadoras y dobladoras que trabajan en sus casas sin ningún tipo de relación contractual con las empresas. Es el objetivo en la lucha contra la economía sumergida del Alto, Medio y Baix Vinalopó en el que va a incidir la Inspección de Trabajo con la colaboración de los sindicatos. Para ello la autoridad laboral ha planificado una serie de actuaciones que se intensificarán en los próximos meses.
El fin último es ayudar a regularizar la situación de todas esas trabajadoras que desarrollan su actividad laboral sin las debidas condiciones de seguridad y salud laboral y sin cotizar a la Seguridad Social, lo que les impide cobrar la prestación por desempleo y, en muchas ocasiones, ni siquiera pueden jubilarse a pesar de haber estado toda la vida trabajando en sus hogares. Es, precisamente, una reivindicación histórica de UGT y, de hecho, en la próxima negociación del convenio colectivo del sector calzado va a ser uno de los asuntos que se pongan sobre la mesa con un rango prioritario. «Llevamos décadas denunciando la situación en la que se encuentran las aparadoras, dobladoras y rebajadoras. Unas trabajadoras fundamentales para la fabricación de zapatos que, sin embargo, son las que cargan sobre sus espaldas los peores efectos del clandestinaje», ha señalado Joaquín Gil Navarro, responsable comarcal de UGT-FICA, destacando su deseo de conseguir «una solución definitiva a este problema histórico con el consenso de los sindicatos, la patronal y la Administración».
Un asunto que se ha abordado en las jornadas celebradas estos días en Petrer para analizar las consecuencias de la economía sumergida en el Vinalopó y avanzar en las estrategias para combatirla.
El ciclo organizado por UGT ha contado con la participación del jefe de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social de Alicante, Vicente Cantó, y de la directora del Instituto Valenciano de Seguridad y Salud en el Trabajo, Cristina Moreno, que han explicado la situación real de todos los procesos que se están desarrollando en la comarca para luchar contra esta lacra. Por su parte Rosario Benitez, secretaria de Acción Sindical e Igualdad de UGT-FICA, ha destacado la importancia que tiene la «total colaboración y comunicación» entre el sindicato y los poderes públicos para desarrollar estas actuaciones. Una intervención que debe incluir medidas en la negociación colectiva que eviten que la economía sumergida pueda campar a sus anchas en el calzado.
