La Concejalía de Medio Ambiente de Elda enviará los inspectores de la brigada verde al vertedero de Las Cañadas para que confirmen que en éste no existe actividad alguna. La Comisión de Peticiones de la Unión Europea ha requerido al Ayuntamiento esta documentación, tras recibir la denuncia de posibles nuevos vertidos en los terrenos.
La concejala de Medio Ambiente, Pilar Calpena, indica que «ante la petición de Europa vamos a inspeccionar el vertedero, que lleva cerrado desde 2014». No obstante, matiza que «la atribución a este respecto compete a la Conselleria de Medio Ambiente y, por lo tanto, a la Policía Autonómica».
Hace poco más de un mes, el concejal de Izquierda Unida, Iñaki Pérez, acudió al Parlamento Europeo para dar cuenta de la situación en la que se encuentra el vertedero de Las Cañadas y, al mismo tiempo, pidió a la UE que mantenga la investigación sobre él. Un expediente que estaba a punto de cerrarse después de varios años sin saber nada sobre la cuestión. En 2010, IU ya acudió a Bruselas para que se salvaguardara estos terrenos y pedir que se controlasen los vertidos que llegaban.
La investigación de la Comisión Europea sobre el vertedero seguirá adelante, hasta que se determine si se sigue realizando algún tipo de actividad ilegal y se obligue a las administraciones y la empresa a cumplir con el deber de controlar y recuperar este hábitat. Por ello, el primer paso dado por la UE es pedir un certificado del estado del vertedero.
El concejal de Izquierda Unida expuso en la Comisión que «nos encontramos ante un caso de ataque al medio ambiente en nuestra ciudad» y aseveró «el paraje de las Cañadas es un hábitat natural protegido por la Unión Europea y nadie hasta el momento nos ha sabido explicar para qué queremos un vertedero que no tiene los permisos para operar».
Desde Izquierda Unida, se indica que la problemática surgida con el vertedero de Las Cañadas tiene su origen en la connivencia del PSOE de Elda con los intereses de una empresa y que el problema se dilató con la entrada del PP al gobierno. «Esto explica por qué en ningún momento ni el PSOE de Elda, ni el PP de Elda nos han mostrado preocupación alguna por la situación del vertedero», explicó el edil.
Pérez insistió en que «todavía seguimos envueltos en un entramado judicial, entre la empresa contra el Ayuntamiento y la consellería de Medio Ambiente, que constantemente ratifica que la empresa estaba operando, desde su ampliación, sin licencias, y que continúa sin tenerlas».
El vertedero inició su actividad en 1989 por acuerdo plenario pero las obras de las nuevas instalaciones empezaron en el año 2006 y finalizaron en 2009. Limpiezas del Mediterráneo construyó nuevos vasos de vertido, un campo de biogás para aprovechamiento energético, balsa de lixiviados y pluviales, depósitos, una nave con toda la maquinaria para residuos urbanos y una planta para escombros
