El Obispado ha impuesto una gestora para la Junta Mayor de la Semana Santa, después de que dos candidatos se presentaran a la presidencia, tras la finalización del mandato de la presidenta, Pilar Martínez. Por un lado, el grupo afín a la gestora nombrada plantea que la situación de la Semana Santa es «tranquila y dentro de la normalidad», frente a otro que afirma que existe un ambiente de fragilidad con dos facciones dentro de las hermandades. M.P.