El director general de Carreteras del Ministerio de Fomento, Jorge Urrecho, ha asistido este viernes, junto al delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Juan Carlos Moragues, al acto de puesta en servicio de las obras de rectificación de las curvas del Angosto, concretamente entre los puntos kilométricos 172+900 y 174+600 de la A-31 a su paso por el término municipal de Villena, una de las actuaciones enmarcadas en el proyecto de la autovía A-33 en el tramo entre la A-31 y la A-35, entre Caudete y La Font de la Figuera.

La inversión total en esta actuación es de 121,7 millones de euros, incluidas, además del presupuesto de obra, las asistencias técnicas de redacción del proyecto, control y vigilancia y expropiaciones.

La rectificación de las curvas tiene una longitud de 1,7 kilómetros y permitirá mejorar los estándares de calidad, comodidad y seguridad de este tramo de la autovía A-31 de Alicante-Madrid. Además, se ha priorizado la ejecución de la rectificación del tramo donde se encuentran las tres peligrosas curvas con el objeto de ponerlo en servicio antes del puente de la Constitución, uno de los momentos de mayor tráfico en la A-31.

De forma ininterrumpida

Para conseguir cumplir el plazo durante el mes de noviembre los operarios han trabajado, de forma ininterrumpida, las 24 horas del día y los siete días de la semana. La decisión de acometer esta fase en noviembre, en el penúltimo mes del año, se debe a que se trata de uno de los periodos con menos tráfico en la peligrosa y colapsada carretera.

Esta actuación, esperada en la comarca del Alto Vinalopó desde hace décadas, permitirá acabar con un punto negro de la A-31, tanto en sentido Madrid como en sentido Alicante. Una zona de trazado sinuoso, situada en las inmediaciones de la cárcel de Villena, donde cada año se registran numerosos accidentes de tráfico. La mayoría con heridos de distinta consideración y algunos de ellos con resultado de muerte.

Estado de ejecución de la A-33

Por su parte, en octubre, se pusieron en servicio las obras de los 23,4 kilómetros de autovía de la A-33 en su tramo entre Jumilla y Yecla, uniéndose a los 31,4 kilómetros de autovía ya en servicio desde 2012 entre el enlace con la A-30 en Blanca y Jumilla.

También se encuentran redactados y aprobados los proyectos de construcción de los dos tramos de la A-33 entre Yecla y Caudete. El tramo entre el enlace con la N-344 y Caudete ha sido licitado en agosto, y el tramo entre Yecla y el enlace con la N-344 se encuentra entre las prioridades de licitación del Ministerio de Fomento.

De esta forma, se aproxima la consecución de una autovía interior importante para las comunicaciones entre Murcia y València, y atractiva frente a itinerarios alternativos por corredores costeros.

Asimismo, tras la puesta en servicio en junio de la variante de la N-344 en La Font de la Figuera, hoy se encuentra abierto al tráfico la mitad del tramo A-31-A-35 entre Caudete y La Font de la Figuera.